Pactos

Los huevos rotos

La Razón
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Un conocido refrán anima a poner los huevos en distintas cestas para evitar el riesgo de perderlo todo. En el mundo de la empresa se llama diversificación de las inversiones, se procura que, si alguna de ellas sale mal, sus pérdidas se vean compensadas por los beneficios de las demás posiciones inversoras.

En política también hay quien reparte los riesgos apostando a la vez por varias opciones. Se diferencia claramente de la estrategia empresarial porque en política no siempre 2 más 2 son 4. Es decir, lo importante políticamente no es que las inversiones rentables superen a las deficitarias, sino tener colocada una parte de la apuesta al caballo ganador.

Esto explica algunos de los movimientos que se producen durante las crisis de los partidos. Cuando hay competición entre dos candidatos, algunos distribuyen su apoyo entre los dos, de manera que venza uno u otro, ellos siempre salen victoriosos.

En otras ocasiones, la razón para dedicar apoyos a causas antagónicas entre sí, es, sencillamente, para debilitar los apoyos de quien va a ganar, de manera que su éxito no sea tan rotundo que se vea obligado a convertir en necesarios los apoyos más prescindibles.

Una última razón tiene que ver con una estrategia a medio plazo. Se trata de horadar poco a poco la imagen del favorito. Si el trabajo tiene éxito, basta con que emerja una alternativa a última hora para arrebatarle el podio.

No se sabe si las apariciones periódicas, pero constantes, de algunos dirigentes críticos con la Dirección actual del Partido Socialista tiene que ver con una de las tres razones, o con las tres a la vez.

En realidad, el propio Sr. Pedro Sánchez se ha convertido en el juguete roto de aquellos que, por distintas razones, tienen como objetivo dañar la imagen de quien consideran que va a ocupar el liderazgo en el PSOE después del próximo Congreso.

Cualquiera que conozca mínimamente la organización socialista sabe que el Sr. Sánchez no tiene posibilidad alguna siquiera de intentar volver a presentarse a unas elecciones primarias. Sin embargo, mantener viva su bandera es un paraguas para aquellos que albergan alguna aspiración.

Mientras se conserve la ilusión óptica de que no va a haber contienda en unas elecciones primarias, los “inversores en futuro” continuarán poniendo huevos en distintas cestas por una u otra razón, o por todas ellas a la vez.

Cada vez que algún diario de tirada nacional parece “destapar” una candidatura, o que algún joven sociólogo diputado es postulado en algún mentidero, no son más que tácticas para indicar a quien corresponda que no todo el campo es orégano y que hay una larga lista de dirigentes o ex dirigentes que esperan asistir con la tranquilidad de su supervivencia asegurada a los procesos futuros.

La intención de promover actos y apariciones públicas del ex secretario general tiene que ver con una instrumentalización del proceso y apuntar la “deseabilidad de una tercera vía”, aunque quizá ni el propio Sr. Sánchez alcanza a verlo.

Esa es la explicación a por qué algunos intentan la cuadratura del círculo, la razón por la que algunos defensores del “no es no” se reubican y se alinean formalmente con la Dirección Gestora. Lo hacen incluso en sus declaraciones públicas y al mismo tiempo dan instrucciones a aquellos que aún les escuchan y son influidos por sus opiniones, para que participen, organicen y movilicen militantes en actos críticos.

Mantienen así su cuota de poder institucional e intentan asegurarla en el futuro.

Lo malo de esto es que la política es tan antigua como el ser humano, está todo inventado y, además muy manido. Por eso, los huevos se pueden romper por llevar tantas cestas.