César Lumbreras

Tormenta de ideas

La Razón
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Los ministros de Agricultura de la UE se reúnen hoy en Bruselas para debatir la PAC que debería aplicarse a partir de 2021, suponiendo que se llegue a tiempo, algo que está por ver. Malta, que ostenta la Presidencia, ha preparado un documento con las prioridades de la futura política agraria: la adaptación de la agricultura, responder a los desafíos medioambientales, invertir en la viabilidad y la vitalidad rural, garantizar el relevo generacional, mantener la orientación al mercado y reforzar la posición de los agricultores en la cadena, además de la simplificación de la normativa. Mientras tanto, el comisario de Agricultura ha dicho días atrás que es necesario modificar el sistema de distribución de las ayudas directas para que el reparto sea más justo y ha mandado un aviso.

Dijo Hogan que en 2013 la Comisión Europea propuso fijar un techo máximo de ayudas por explotación y el pago de una cantidad fija por hectárea. Eso habría permitido, según él, ayudar más a las explotaciones tradicionales. Sin embargo, los ministros, como representantes de los Estados miembros, y el Parlamento Europeo no dieron su apoyo a esta propuesta. Pues bien, Hogan anunció que va a presentar propuestas similares en el futuro.

Es decir, que volveremos a hablar de la modulación de las ayudas y de la famosa «tasa plana». El comisario de nacionalidad irlandesa señaló también que se debía conceder un apoyo adicional a los jóvenes y a las zonas con dificultades, como las de montaña, y actuar sobre la cadena alimentaria para que los agricultores y ganaderos reciban su parte justa del pastel. Estamos, como se puede comprobar, en plena tormenta de ideas en la que no hay que olvidar el elemento fundamental de todo: el dinero que habrá para financiar la PAC.