Opinión

¿Gafe o afortunado?

El BCE se ha mantenido firme y ha aplicado una nueva subida en los tipos de interés.

A sign for a Silicon Valley Bank private branch is displayed in San Francisco, Tuesday, March 14, 2023. (AP Photo/Jeff Chiu)
Silicon Valley BankASSOCIATED PRESSAgencia AP

Una nueva borrasca, en forma de crisis, vuelve a alejar el buen tiempo en la economía. Por si fuera poco que después de la crisis de 2008, y sin recuperarnos completamente, la pandemia del Covid 19 hundiese el consumo y el crecimiento económico y, lo que es peor, produjese un shock de oferta como no conocíamos, rompiendo la cadena de suministros y encareciendo las materias primas, llegó un tiro de gracia de la mano de la guerra de Ucrania y el encarecimiento de la cesta de la compra.

Pero hay más, se trata de la explosión de una bomba de relojería con el desplome del Silicon Valley Bank (SVB), extendiendo el temor a una nueva crisis financiera de carácter global.

Aunque las características y las causas de esta quiebra tienen pocas similitudes con lo que ocurrió en 2008, eso no significa que no vaya a tener consecuencias en nuestras economías. De hecho, las autoridades políticas y monetarias se han apresurado en salir a la palestra para intentar infundir confianza.

La reacción de los mercados fue inmediata, con un desplome general y, en particular, del sector bancario en EEUU, Europa y Asia. Es previsible que en el corto plazo, disminuya el crédito, porque los bancos serán más cuidadosos evitando morosidades, como la propia demanda de préstamos que caerá. Esto nos acercaría al escenario de una nueva recesión.

La política de subidas de tipo de interés ha sido determinante en esta crisis. Al subir el tipo, los bonos corporativos y las letras del tesoro perdieron valor en el mercado, de manera que cuando los clientes del SVB fueron masivamente a retirar los fondos de sus cuentas por el pánico colectivo que se estaba generando, la entidad vendió sus títulos en régimen de pérdidas.

El BCE se ha mantenido firme y ha aplicado una nueva subida en los tipos de interés. La expectativa era que se moderarían los incrementos previstos para marzo y mayo. Está claro que la amenaza de la inflación es tan fuerte que lo demás queda subordinado al control de esta para la Sra. Lagarde.

Con Pedro Sánchez hemos vivido las tres últimas crisis más importantes. Aunque en unos meses los ciudadanos podrán hacer balance de como las ha gestionado, algunos analistas políticos dicen que el líder socialista “ha nacido de pie”, en referencia a su buena suerte, para otros, es un gafe, que trae la mala suerte a los demás.