Big data
La mayoría de las familias pasa por una mala situación económica
El 42,4% considera que la situación en España para encontrar o mejorar un puesto de trabajo es peor que hace seis meses
La situación económica en España no pasa por uno de sus mejores momentos, si acaso por uno de los peores, con un crecimiento imparable del precio de la cesta de la compra, por citar un ejemplo que queda muy próximo a los ciudadanos al pie de la calle, es decir, a aquéllos a los que subidas del precio del dinero, como la dictada por el BCE, les afecta de manera especialmente amarga, pues suponen un incremento de las cuotas de las hipotecas que para una familia de clase media puede suponer no llegar a final de mes, máxime, cuando es un nuevo incremento que suma y sigue, una vez agotados los ahorros y con poco o nulo margen ya para reducir el gasto familiar. De ahí, los datos recogidos sobre la situación económica de los españoles.
Así, en el barómetro número 3.410 de este mes de junio del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), se recoge la opinión de los españoles con respecto a la situación económica general de España:
El 56,9 por ciento afirma que es mala o incluso muy mala, entre estos es el 43,1 por ciento sostiene que es mala y el 13,8 por ciento muy mala, frente al 32,3 por ciento que mantiene que es buena o muy buena, siendo el 30,3 por ciento buena y el 2,0 por ciento muy buena.
En cuanto a los datos analizados por segmentos de edad, los que perciben como mala o muy mala la economía española constituyen la mayoría en todos esos segmentos de edad. Incluso superan el 60 por ciento en los comprendidos en el grupo de edad entre 18 y 54 años. Es entre los mayores de 64 años en donde se registra menor distancia entre los que ven la economía española en situación mala o muy mala y los que la perciben como buena o muy buena, pero aun así son mayoría los que opinan que es mala o muy mala.
Si analizamos por electorados, observamos una llamativa división de opiniones entre los votantes de la izquierda y de la derecha. Los primeros opinan en su mayoría que la situación es buena o muy buena; el 52,9 por ciento del electorado del PSOE y el 53,5 por ciento de SUMAR. Mientras que sucede todo lo contario entre los votantes de las derechas, en donde el 74,8 por ciento de los que votaron al Partido Popular consideran la situación de la economía mala o muy mala y el 84,0 por ciento en el caso de votantes de Vox.
En cuanto al punto de vista de según el nivel de estudios, los que peor ven la situación de la economía nacional son los que han cursado Formación Profesional, hasta el 61,4 por ciento de este colectivo la califica de mala o muy mala. Los más optimistas con la economía son los que cuentan con estudios primarios.
Los problemas relacionados con la economía ocupan tres de los primeros cuatro puestos en el ranking de las preocupaciones de los españoles; la primera, con el 37,7 por ciento es la crisis económica, los problemas de índole económica. Le sigue en el segundo puesto el paro, con el 33,5 por ciento y en cuarta plaza se encuentran los problemas relacionados con la calidad del empleo, con el 16,0 por ciento.
En el estudio realizado por el CIS correspondiente al índice de Confianza del Consumidor del mes de mayo de 2023, el 44,0 por ciento de los españoles consideraba que la situación económica actual de su hogar era peor que hacía seis meses. Solo el 17,7 por ciento afirmaba que era mejor.
El 42,4 por ciento de la población considera que la situación en España para encontrar/mejorar un puesto de trabajo es peor que hace seis meses. Únicamente el 22,1 por ciento estimaba que había mejorado.
Una vez vistos todos estos datos, cabe preguntarse si las declaraciones del Gobierno, en boca, no sólo del Presidente, sino también de sus ministras de Economía y Trabajo, declaraciones en las que se valora y hace gala de las situación económica de España y de las medidas puestas en marcha por la coalición que rige el Ejecutivo, responden a un intento por evitar la crítica, de cara a las próximas elecciones, o son fruto del complejo de Alicia en el País de las Maravillas, por el que si la realidad no se ajusta a la voluntad, se cambia ésta para que diga lo que uno quiere, en este caso, el Gobierno, que parece vivir en otra España, muy alejada de la mayoría de los ciudadanos, porque si no, sólo quedaría pensar que el Ejecutivo miente deliberadamente, incluso a sus propios «médicos», incluidos los europeos.
✕
Accede a tu cuenta para comentar