Sin Perdón

La oficialidad del catalán en la UE

«Con su operación, Sánchez consigue obligar al PP a que su único aliado pueda ser Vox»

Al final parece que Sánchez no se saldrá con la suya y no se podrá gastar una cifra multimillonaria para pagar otro de los peajes que le ha impuesto Puigdemont para seguir en La Moncloa. Hay que reconocer que es muy generoso, aunque el problema es que lo pagamos entre todos. La realidad de este Gobierno es que no tiene ni idea de economía y sí de despilfarrar. He de reconocer que me sorprende que tenga a gala ser economista, porque no le sacó mucho provecho a sus estudios de empresariales en el Centro Universitario Reina María Cristina de El Escorial. Hace todo aquello que nunca haría un buen economista. En cambio, hubiera triunfado estudiando o dando clases de Políticas en esa facultad de izquierda radical de la Complutense. Me gusta recordar que soy catalán, lo hablo, leo y escribo. Y además me gusta mucho, aunque mi identidad no pasa porque los licenciados o graduados en esta disciplina filológica se puedan enchufar a costa del Estado en el Parlamento Europeo. Nunca entenderé cuál es la victoria de profundizar en la Torre de Babel en que los políticos convierten las instituciones por intereses partidistas. Me gustaría que gastaran el dinero en cosas más útiles para Cataluña. Es una operación en la que Sánchez siempre gana. Por ello, no le voy a quitar ningún mérito. En primer lugar, hace más difíciles las relaciones entre Junts y el PP que consigue una victoria pírrica aunque no haya participado activamente en impedirlo. No era necesario y es coherente con su posición política. Los representantes de Sánchez, utilizando incluso eurodiputados de otros países, especialmente alemanes, se han encargado de transmitir que es culpa del PP. Estamos ante un tema fundamental para Puigdemont. Una vez más le han levantado la camisa, pero la política sanchista es el arte del engaño. Por otra parte, si hubiera conseguido el voto favorable se apuntaría un tanto, aunque fuera en contra del modelo constitucional que ha defendido el PSOE. Hay que añadir que convertir el Parlamento Europeo en una Torre de Babel es un lío enorme, porque sienta un precedente que se puede extender. Sánchez consigue dos objetivos con esta operación. El primero es atar a Puigdemont. Y el otro es obligar al PP a que su único aliado pueda ser Vox, ya que cualquier pacto con Junts será imposible.

Francisco Marhuenda. De la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España. Catedrático de Derecho Público e Historia de las Instituciones (UNIE)