¿Qué implica la decisión de Francisco?

-¿Qué implica la decisión del Papa?

-Hasta la fecha, el derecho canónico prevé que perdonar el pecado del aborto sea facultad del obispo de la diócesis, aunque en algunos momentos el obispo delega a algunos o incluso a todos los sacerdotes de su diócesis la absolución de este pecado. En cambio, durante el Jubileo, el Papa Francisco dio facultad a todos los sacerdotes de poder absolver de este pecado como signo concreto de que la misericordia de Dios no conoce límites. El derecho canónico es un conjunto de leyes y desde el momento en el que hay una disposición del Papa que modifica el dictado de la ley, se debe necesariamente cambiar el artículo relacionado con esa específica disposición.

-¿Podría esta medida suscitar críticas hacia el Pontífice?

-No veo por qué debería haber miedos para dar la facultad de absolución a todos los sacerdotes, quienes, justamente por ser sacerdotes, son ministros de la reconciliación y del perdón.

-¿Reafirma Francisco que el aborto es un pecado grave?

-La medida es una forma mediante la que se indica el recorrido de la Iglesia tal y como lo imagina Francisco, siguiendo la huella de sus predecesores; es decir, salir al encuentro de todos: lo importante es que las personas se arrepientan. Recordemos que el Papa insiste con toda la fuerza que el aborto es un pecado grave, y también, con la misma fuerza, que no hay pecado que Dios no pueda perdonar.

-¿Ha sido el Jubileo un éxito?

-Hoy podemos afirmar con datos seguros que participaron en el Jubileo, aquí en Roma, 21.292.926 peregrinos. Por primera vez en la historia de los Jubileos, este Año Santo tenía un carácter universal. En todo el mundo se abrieron las Puertas de la Misericordia como testimonio de que el amor de Dios no puede conocer ninguna frontera.

*Presidente del Pontifico Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización y encargado del Jubileo