Salud

Seguimiento telemático para un mejor abordaje de la escoliosis

El Hospital Universitario Infanta Elena pone en marcha un proyecto pionero para su humanización en el seguimiento del adolescente

columna escoliótica
infografiaJosé Luis Montoro

La escoliosis es la desviación de la columna, y la idiopática del adolescente (EIA) es el motivo principal de visita al traumatólogo pediátrico entre los 9 y 15 años, representando entre el 20-25% de las consultas a este especialista. Sin embargo, sólo en los casos más severos debe tratarse con un corsé o, en los casos extremos, con una intervención quirúrgica, mientras que más del 90% de los pacientes deben ser únicamente revisados cada seis, nueve o 12 meses, según el momento del desarrollo en que estén.

Unas revisiones que se prolongan desde la infancia hasta el final de la adolescencia, ya que como enfermedad del crecimiento puede presentar cambios en todo el mismo, con el tiempo invertido y las molestias que ello conlleva. Además, al estar en edad pediátrica, debe acudir siempre a las consultas acompañado por un adulto, lo que supone una pérdida de horas de trabajo para los padres o tutores, y las correspondientes del niño en el colegio. En este sentido, se calcula que un preadolescente diagnosticado de EIA sin complicaciones acudirá a consulta entre 5 y 15 veces hasta que termine su crecimiento.

En este contexto, el Hospital Universitario Infanta Elena de Valdemoro ha puesto en marcha un proyecto para la humanización en el seguimiento de la escoliosis en el adolescente cuyo objetivo es mejorar la calidad asistencial y la satisfacción de los pacientes y sus familias disminuyendo las revisiones presenciales en las consultas que, dada la naturaleza de este problema de salud, son muy numerosas. Pionero a nivel nacional y liderado por los doctores Cristóbal Suárez, jefe del Servicio de Cirugía Ortopédica y Traumatología del centro, y Borja Muñoz Niharra, responsable de su Unidad de Ortopedia Infantil, el proyecto dota al centro de una herramienta pionera para realizar consultas a distancia de los pacientes con EIA, forma más frecuente de este problema traumatológico, así como para facilitar la programación de citas. Todo ello disponible tanto para los pacientes de la zona de influencia del hospital como para los de otras áreas a través de la libre elección.

De los 10 a los 18 años

«En los tiempos en los que estamos cualquier medida que evite que los pacientes acudan al hospital más allá de lo imprescindible es deseable para evitar contagios. Sin embargo, este proyecto se diseñó antes de la pandemia. Nos dimos cuenta de que había niños que revisábamos dos veces al año desde los 10 hasta los 18 años y fuimos conscientes de lo que suponía en horas pasadas en el hospital. Muchos padres nos solicitaban que las revisiones coincidieran con vacaciones para minimizar los trastornos. Nos planteamos este proyecto como una forma de poder realizar un seguimiento adecuado sin que con ello ni niños ni padres tengan que pasar demasiadas horas en el hospital», explica Suárez.

La iniciativa plantea, una vez confirmado el diagnóstico de EIA por parte del especialista –normalmente después de una derivación desde Atención Primaria tras la detección de alguna alteración a la normalidad, y realizada la primera visita en los pacientes seccionados–, el establecimiento de un calendario de consultas no presenciales donde sólo será necesario acudir al hospital para realizar radiografías, que pueden obtenerse en horas que ocasionen menos molestias al paciente y a sus familias.

«El seguimiento de la escoliosis se realizará de forma mixta entre consulta presencial y telemática buscando siempre dar el mejor tratamiento médico combinado con la comodidad del paciente y su familia. La primera visita debe ser obligatoriamente presencial. Se realizará una exploración física exhaustiva y se completará la historia clínica del paciente preguntando por sus antecedentes personales y familiares. Se revisará ahí también la radiografía que el niño suele aportar, pues generalmente los pediatras se las solicitan de antemano. Si en esta consulta detectamos que el niño cumple criterios para realizar seguimiento no presencial, en esencia EIA leves o con escaso potencial de progresión, se incluirá en el Programa de Seguimiento Humanizado», concluye el experto.