Desalojos

Alerta por el repunte de casos de este tipo de okupación: las llamadas al 112 han crecido un 75% en Madrid

El servicio puesto en marcha por la Comunidad de Madrid demuestra que estas okupaciones están a la orden del día en España

MADRID.-AMP.- Desalojado el centro social okupado 'La Ferroviaria' en Arganzuela
La Policía durante un desalojo en MadridEuropa Press

"No hablamos de situaciones puntuales de necesidad, sino de un sistema que permite que algunos se aprovechen deliberadamente", denunció Kathy, presidenta de la Asociación de propietarios de viviendas contra la inseguridad jurídica (APROVIJ) en palabras a LA RAZÓN semanas atrás. Muchos okupas se amparan en esa supuesta vulnerabilidad, que no siempre es así, para lograr evitar un desalojo que en muchas ocasiones puede tardar meses y años en llegar.

Los okupas buscan cualquier resquicio para entrar en los hogares. Como contó un vecino del madrileño barrio de Salamanca a LA RAZÓN, algunos aprovecharon el apagón para entrar en viviendas ajenas: "La puerta estaba quitada y se habían enganchado a la luz". No solo son hábiles para entrar, también para mantenerse. Conocen la ley y se amparan en cualquier vacío para evitar el desalojo. Las okupaciones pueden ser de muchos tipos, pero en los últimos tiempos uno de ellos es el más repetido: la inquiokupación.

¿Qué es la inquiokupación?

La inquiokupación se produce cuando los inquilinos, con un contrato de alquiler en vigor, dejan de pagar la renta en algún momento y se niegan a abandonar la propiedad, es decir, los inquilinos morosos. Al haber un contrato previono se considera okupación delictiva y además, no pueden favorecerse de la nueva reforma en la Ley de Enjuiciamiento Criminal que permite que los delitos de allanamiento de morada y usurpación de vivienda se tramiten bajo el procedimiento de juicios rápidos.

Además, los inquiokupas vulnerables están protegidos por el Real Decreto 11/2020, vigente desde la pandemia. Consiste en lo siguiente: "Se establece la suspensión hasta el 31 de diciembre de 2025 de los procedimientos de desahucio y lanzamientos en los supuestos y de acuerdo con los trámites ya establecidos, así como, en consonancia, la posibilidad de solicitar hasta el 31 de enero de 2026 compensación por parte del arrendador o propietario", explica la última prórroga, publicada en el Real Decreto-ley 1/2025.Esto significa la paralización de los desalojos de personas vulnerables sin alternativa habitacional.

La vulnerabilidad complica los desalojos

Los propietarios, como también explicó Kathy y han manifestado en la calle, están totalmente en contra de esta medida: "Es un decreto que lejos de ser una solución, ha sido el origen de una crisis en el mercado del alquiler. Presentado como una medida de protección, ha generado el efecto contrario: inseguridad, retirada masiva de viviendas y más dificultades para acceder a un alquiler".

Añade su descontento con la forma en la que se decide si una persona es o no vulnerable: "El problema es que la vulnerabilidad no puede ser eterna. Ya no hablamos de situaciones puntuales de necesidad, sino de un sistema que permite que algunos se aprovechen deliberadamente del vacío legal generado por el Real Decreto 11/2020".

Las llamadas demuestran el crecimiento del número de casos

La Comunidad de Madrid (CAM) puso en marcha en junio de 2022 el servicio 112 Ocupación, enmarcado en el Centro de Coordinación Municipal (CECOM). Funciona desde la sede del 112 para optimizar la labor de las distintas fuerzas policiales y facilitar su colaboración con los equipos de emergencias. Este número ha registrado, solo en lo que va de año, un incremento de más del 75% en las llamadas.

Lo llamativo llega al revisar los datos de llamadas a este número. En apenas un mes a principios de año, las consultas a esta línea se dispararon, pasando de 32 en la primera semana de enero a 56 en la primera de febrero por casos de este tipo. Desde su puesta en marcha y hasta el 3 de febrero de 2025, el teléfono gestionó 3.826 llamadas, según datos oficiales del Gobierno de la CAM. Gracias a este servicio, 219 personas han podido alertar de la okupación en curso de sus propiedades privadas; y en 42 ocasiones los técnicos han logrado impedir el allanamiento o proceder al desalojo tras recibir la alerta.

El sufrimiento no acaba con el desalojo

Los okupas y también los inquiokupas no tienen ataduras una vez se decreta el desahucio y pueden llegar a ser peligrosos. La Policía Nacional ha detenido a un hombre de 64 años por su presunta implicación en un incendio registrado en una quinta planta de un edificio ubicado en la zona norte de la ciudad. Esa persona detenida era el inquiokupa, que tenía que abandonar la vivienda en los días siguientes y presuntamente fue el culpable.

Otros se encuentran el piso en condiciones totalmente inhabitables. Esto le ocurrió a Manuel, que, entre lágrimas, explicó que al recuperar su vivienda vio que estaba llena de basura y todo tipo de residuos llegando a un total de 900 kilos y pareciendo un vertedero: "Ver tú casa, que has comprado, que has pagado, y encontrártela así es muy fuerte. Hemos salido a las escaleras y he tardado 24 horas en recuperarme un poco", lamentaba.