Investigación
Descubren el efecto inflamatorio de la contaminación en los infartos
Un estudio español demuestra este mecanismo involucrado en la enfermedad cardiovascular
Investigadores españoles del Hospital La Princesa, de Madrid, liderados por el cardiólogo Alberto Cecconi y en colaboración con el Centro Nacional de Investigación Cardiovascular (CNIC), han demostrado cómo influye la exposición reciente a la contaminación del aire en el infarto de miocardio.
El estudio, publicado en la prestigiosa revista científica «Scientific Reports», analizó exhaustivamente los datos de 192 pacientes con infarto de miocardio o angina estable, y de forma paralela recogió la información de las estaciones de medición de la calidad del aire más próximas a sus domicilios.
Los resultados evidenciaron que una mayor exposición a contaminantes del aire en las 24 horas previas al ingreso se asocia a cambios proinflamatorios específicos en el perfil de los linfocitos y de la expresión génica (micro-RNA) de los pacientes. Estos hallazgos implican que la alta contaminación promueve un descontrol del sistema que regula al inflamación asociada a los infartos. Este artículo revela uno de los mecanismos involucrados en la enfermedad cardiovascular inducida por la contaminación.
Por otra parte, esta investigación responde al reciente llamamiento de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC, por sus siglas en inglés) que, consciente del alto coste social en términos de muertes y discapacidad que la contaminación del aire supone en nuestro entorno más próximo, ha animado a los profesionales de la salud a que se involucren activamente e informen a la población de los riesgos para su salud que comporta respirar aire contaminado.
Más infartos y de peor pronóstico
Aunque diversas investigaciones previas han puesto ya de manifiesto el vínculo entre la contaminación del aire y las enfermedades cardiovasculares como infartos de miocardio e ictus, el estudio del Hospital de La Princesa ha permitido descubrir mecanismos no conocidos previamente. Queda establecido que en los días de mayor contaminación se producen más infartos, siendo estos de mayor extensión y de peor pronóstico.
Todo ello cobra especial relevancia en las dos ciudades españolas más pobladas y con mayor densidad de tráfico, Madrid y Barcelona. Dichas urbes destacan entre las ciudades de Europa por exceso de fallecimientos anuales en relación con la contaminación del aire.
El reconocimiento de los factores de riesgo cardiovascular y su control han sido procesos claves de la medicina reciente para mejorar la salud de las personas. La hipertensión arterial, el colesterol o el tabaquismo son algunos de estos factores con estrategias de prevención individuales. Según los autores del estudio, la contaminación de aire es un factor de riesgo cardiovascular de alto impacto y por ello urge la implementación de estrategias de prevención colectivas.
Y es que la polución ambiental es un importante factor de riesgo para la salud que conduce a numerosas enfermedades cardiovasculares y respiratorias. En 2015, casi nueve millones de muertes en todo el mundo fueron atribuibles a la contaminación del aire. En Europa se ha estimado una mortalidad anual de 790.000 personas (133 muertes por 100.000 habitantes). De este exceso de mortalidad, al menos el 48% se debe a enfermedades cardiovasculares como la enfermedad arterial coronaria (EAC) y el ictus isquémico.
Tanto la exposición crónica como la aguda a los contaminantes presentes en el aire se asocian con un mayor riesgo de infarto de miocardio. Además, aumenta también el de sufrir arritmias ventriculares y la mortalidad vinculadas también con el infarto.
✕
Accede a tu cuenta para comentar