Investigadores españoles encuentran un fármaco sin efectos secundarios para dejar de sentir mareos

Los molestos mareos que a menudo acompañan a los viajes en coche, autobús, barco u otros medios de transporte pueden convertirse en una experiencia del pasado gracias a una investigación liderada por Albert Quintana, profesor agregado del Departamento de Biología Celular, Fisiología e Inmunología, e investigador del Instituto de Neurociencia de la Universidad Autónoma de Barcelona. El estudio ha arrojado luz sobre las causas de los mareos y, lo que es más emocionante, ha proporcionado una solución efectivasin los efectos secundarios típicos de los tratamientos actuales.

Los mareos son una experiencia desagradable y caótica, que a menudo comienza con una disminución de la tensión, pérdida de visión y una sensación general de malestar. Esto se debe a un conflicto en nuestro organismo causado por la discrepancia entre la información que reciben nuestros ojos y la que recibe nuestro sistema vestibular a través del oído interno. Esta discrepancia puede ser una respuesta evolutiva diseñada para protegernos de ingerir sustancias tóxicas que provocan visión doble o pérdida de equilibrio, lo que desencadena una serie de respuestas fisiológicas para limitar el daño.

A menudo, los medicamentos disponibles para tratar los mareos causan somnolencia, lo que limita su utilidad en situaciones en las que es necesario mantenerse despierto y alerta. Sin embargo, el descubrimiento de la neurona responsable de los mareos ha allanado el camino para el desarrollo de un medicamento específico que elimine los efectos del mareo sin los efectos secundarios sedantes.

Este medicamento está en fase de desarrollo y aún no está disponible en el mercado, pero se espera que proporcione una solución efectiva y sin somnolencia para quienes padecen mareos en situaciones de viaje. Desde el grupo de investigadores se expresa un gran optimismo acerca de esta nueva opción de tratamiento que podría ayudar a las personas a evitar los mareos sin experimentar somnolencia. Aunque el fármaco se ha mostrado eficaz en ratones, aún se requiere más investigación para evaluar su efectividad en seres humanos y llevarlo al mercado.