Investigación
¿Qué es ALA-CART, la terapia con células CAR-T de próxima generación?
Los investigadores confían en empezar los ensayos clínicos con humanos en dos años.
Las terapias con células CAR-T se desarrollaron inicialmente para matar linfocitos B tumorales. Han supuesto una auténtica revolución en el tratamiento del cáncer hematológico y de otros tumores. Pese a que el tratamiento mediante CAR-T es individualizado, no funciona igual de bien en todos los pacientes ni contra todo tipo de tumores.
Con el fin de revertir esto último, investigadores del Campus Médico Anschutz de la Universidad de Colorado, en EE UU, han desarrollado con éxito una interacción supercargada de la terapia con células CAR-T que puede mejorar la eficacia contra las células cancerosas que son más difíciles de detectar y combatir con las terapias CAR-T anteriores.
Se trata de ALA-CART, una terapia de próxima generación destinada a mejorar los resultados en aquellos pacientes con cánceres resistentes, según el estudio publicado hoy en la revista "Cancer Cell".
“Este enfoque de próxima generación, llamado ALA-CART (células CAR-T activadoras de LAT), optimiza las células CAR-T para eliminar de manera más efectiva las células cancerosas, incluidas aquellas que han podido esconderse de las células CAR-T tradicionales”, afirma en un comunicado del artículo Catherine Danis, autora principal del estudio y becaria postdoctoral en la Facultad de Medicina de la Universidad de Colorado.
La terapia con células CAR-T consiste en extraer las células T de un paciente, modificarlas para que reconozcan las células cancerosas y luego reinfundirlas en el paciente, donde se dirigen a las células cancerosas en todo el cuerpo.
Pero algunas células cancerosas pueden evadir la detección de las células CAR-T, lo que lleva al fracaso del tratamiento y a la recaída.
Y es que las células CAR-T, según investigaciones previas, activan de manera ineficiente la proteína de andamiaje LAT en respuesta a niveles bajos de antígeno, lo que conduce a una eficacia disminuida
Utilizando células T humanas y células leucémicas en modelos de ratón especializados, los investigadores desarrollaron las nuevas células ALA-CART que mostraron resultados prometedores en la lucha contra las leucemias linfocíticas agudas que eran resistentes a las células CAR-T tradicionales.
“ALA-CART mejora la capacidad de las células CAR-T para detectar y atacar las células cancerosas resistentes de manera más eficaz. Esto podría conducir a resultados más duraderos, incluso cuando otros tratamientos han fallado”, asegura M. Eric Kohler, autor y miembro del Centro Oncológico de la Universidad de Colorado.
“También muestra signos de que podría reducir los efectos secundarios que suelen acompañar a las terapias tradicionales”, añade.
Las terapias con células CAR-T se han utilizado durante más de una década, recuerda Kohler.
“Cuando miramos atrás -prosigue-, es fácil ver lo revolucionarias que han sido las células CAR-T. Pero, para muchos pacientes, esta terapia no es suficiente. Y, al dar un paso atrás, nos damos cuenta de que hemos estado utilizando estas células CAR-T con el mismo diseño básico durante los últimos 15 años”.
“Cuando comenzamos este proyecto, queríamos entender por qué este diseño permitía que ciertas células leucémicas escaparan de la terapia. Una vez que entendimos eso, supimos cómo diseñar nuestras células ALA-CART. Lo sorprendente es que no solo solucionamos el problema de las células leucémicas que escapaban, sino que mejoramos múltiples aspectos de las células ALA-CART, y esperamos que esto se traduzca en mejores resultados para los pacientes en el futuro”, añade.
El siguiente paso es llevar el ALA-CART a ensayos clínicos para evaluar su seguridad y eficacia en pacientes humanos. Danis dijo que esperan comenzar esa fase en los próximos dos años.
Mientras tanto, los investigadores también están probando el tratamiento en otros tipos de cáncer, incluida la leucemia mieloide aguda, el mieloma múltiple y los tumores sólidos.
"Esto marca un cambio importante en la inmunoterapia contra el cáncer y ofrece una innovación revolucionaria que eventualmente podría mejorar la supervivencia y la calidad de vida de los pacientes con algunos de los cánceres más difíciles de tratar", confía Danis.