Los tres beneficios del agua de la playa para nuestra piel en verano

Con la llegada del verano, millones de personas acuden a las costas en busca de relax, bronceado y diversión. Pero más allá del placer de nadar en el mar, el agua salada esconde propiedades naturales que benefician notablemente la salud de nuestra piel. Expertos en dermatología y terapias naturales coinciden en que el agua de mar puede ser una aliada para el cuidado cutáneo. A continuación, te contamos los tres principales beneficios que ofrece:

1. Limpieza y efecto antibacteriano natural

El agua del mar contiene sal, yodo y minerales como el zinc y el magnesio, que actúan como un potente antiséptico natural. Estos elementos ayudan a limpiar la piel en profundidad, eliminando impurezas y reduciendo la proliferación de bacterias. Por ello, es especialmente beneficiosa para personas con acné o piel grasa.

2. Mejora de afecciones cutáneas

Diversos estudios han demostrado que la exposición al agua salada puede aliviar síntomas de enfermedades como la psoriasis, la dermatitis o los eczemas. El contacto regular con el agua del mar ayuda a reducir la inflamación, aliviar la picazón y acelerar la regeneración de la piel.

3. Exfoliación suave y natural

El movimiento del mar y la composición del agua contribuyen a eliminar células muertas de forma delicada pero efectiva. Este proceso de exfoliación natural deja la piel más suave, luminosa y con una textura visiblemente mejorada.

Aunque el mar ofrece múltiples beneficios, los especialistas recomiendan enjuagarse con agua dulce después del baño para evitar la resequedad que puede provocar la sal si se queda en la piel durante demasiado tiempo. Y, como siempre, no olvides usar protector solar.

Más allá de disfrutar del paisaje y la brisa marina, recuerda que cada chapuzón también es una oportunidad para cuidar tu piel.