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Sociedad

El sueldo de una enfermera en una residencia: 1.300 euros al mes de tope máximo

Satse denuncia que en algunos centros de mayores cada profesional tiene que atender hasta a 200 residentes

Jornada trágica en Murcia con seis fallecidos por Covid y 324 nuevos contagios Marcial GuillénEFE

El Sindicato de Enfermería (Satse) ha denunciado la falta de reconocimiento salarial "a las penosas y difíciles condiciones laborales de las enfermeras y enfermeros que trabajan en centros sociosanitarios, especialmente las residencias de mayores, al ser retribuidos con unos 1.000 euros al mes en los de carácter privado y en torno a los 1.300 euros mensuales en los públicos. En un comunicado, Satse subraya que mientras la situación de la enfermería que presta asistencia y cuidados en los centros sociosanitarios “ha empeorado notablemente durante los meses de lucha contra la pandemia de la Covid-19, sus condiciones laborales siguen siendo muy preocupantes al tener que realizar un sobreesfuerzo aún mayor por la creciente carga de trabajo sin una compensación justa y adecuada”. Esta organización denuncia además que la precariedad laboral de estos profesionales se produce también por la falta de los “suficientes y necesarios compañeros y compañeras en los centros para poder atender y cuidar como se merece a un colectivo tan vulnerable y necesitado de una asistencia permanente y continuada como son los mayores, al ser dependientes o residentes pluripatológicos en muchos casos”. En este sentido, Satse revela que la media de personas mayores por cada enfermera o enfermera supera en la mayoría de los casos los 100 residentes, dándose el caso de centros con más de 200 pacientes por cada profesional, “lo que supone unas cargas de trabajo absolutamente desproporcionadas e inasumibles”. El sindicato reclama por ello un aumento de las plantillas en las residencias de mayores de nuestro país. Recuerda que un estudio elaborado junto con el Consejo General de Enfermería concluye que las residencias no están preparadas para una segunda ola de Covid-19, según reconocen los enfermeros y las enfermeras que trabajan en las mismas, a tenor de las condiciones en las que se siguen encontrando.