El Gobierno balear ha informado de que tres estudiantes que estaban de viaje de estudios en Mallorca se fugaron el sábado pasado a la península y ahora “están pendientes de localización”. Los jóvenes se habrían marchado por sus propios medios a sus comunidades de origen incumpliendo los protocolos sanitarios.

Hasta el momento, son249 los estudiantes trasladados al “hotel puente” Palma Bellver de la isla por haber tenido relación directa o indirecta con el macrobrote de coronavirus, que ha dejado más de 1.100 afectados en diferentes comunidades autónomas.

Según ha informado la Conselleria de Salud y Consumo, de los 249 jóvenes trasladados, 64 han dado positivo por PCR y 185 han dado negativo, lo que supone una tasa de positividad del 25,7%. Entre los que han dado positivo, 14 jóvenes permanecen ingresados en el Hospital Universitario Son Espases con síntomas leves.

La Conselleria de Salud realizó un rastreo masivo al tener conocimiento del brote y tiene detectados a un total de 265 jóvenes provenientes de Andalucía (214), Madrid (21), País Vasco (18) y Galicia (12) todavía de viaje en varios hoteles de la isla, que podrían haber tenido relación directa o indirecta con el brote.

En la actualidad, un total de 13 estudiantes están pendientes de ser trasladados al Hotel Bellver. Para estos estudiantes que todavía permanecen en sus hoteles se ha establecido un protocolo de control en colaboración con la Delegación de Gobierno para que queden aislados en sus habitaciones.

En primer lugar, se ha puesto a disposición de las familias un número de teléfono para los estudiantes y sus padres o tutores que necesiten algún tipo de información: 900 700 222. El teléfono presta atención de 08.00 a 20.00 horas por parte de dos enfermeras de la Central de Coordinación COVID. Además, psicólogos de la Central de Coordinación pueden dar apoyo psicológico telefónico a los jóvenes o familiares que lo precisen.

Multa de 200.000 euros

Por otro lado, el Govern de Baleares ha propuesto sancionar con 200.000 euros al promotor del festival de “reggaeton” del pasado 15 de junio en la Plaza de Toros de Palma, considerado uno de los focos de la cadena contagios

Así lo ha explicado la consellera de Presidencia, Función Pública e Igualdad, Mercedes Garrido, en una rueda de prensa tras la reunión del Centro de Comandamiento Operativo Integrado (Cecopi), donde ha defendido las actuaciones de la Patrulla Verde del Ayuntamiento de Palma y la dirección de Emergencias y Turismo en relación con la fiesta en la Plaza de Toros donde algunos asistentes no respetaron las medidas de prevención de la Covid-19.

Ha comentado que el 20 de junio se celebró otro concierto en este recinto de la ciudad y que se respetaron las medidas sanitarias establecidas, ya que “nadie se movió de la silla”, mientras que el concierto del pasado 15 de junio fue “un desmadre”.