Narcotráfico

Así es la red de “narcobuzos” españoles y marroquíes que opera en aguas del Mediterráneo

Recogen la droga del fondo del mar y la depositan en embarcaciones de recreo, lejos de las zonas más vigiladas

Imagen de archivo de una operación contra los «narcos» que empleaban buzos y motos de agua para introducir la droga
Imagen de archivo de una operación contra los «narcos» que empleaban buzos y motos de agua para introducir la drogalarazon

Una red de “narcobuzos” españoles y marroquíes es utilizada, con base en Nador, por los narcotraficantes para depositar la droga en enmarcaciones y lugares de la costa que, en teoría, están menos vigilados. En la red, participan varias decenas de buzos y son una alternativa a los sistemas tradicionales para sacar la droga de Marruecos, como lanchas con potentes motores, avionetas, drones, etcétera. Este siste,a, ya ha sido utilizado en Colombia y, el año pasado, fue abortada una operación en Asturias y detenidos varios individuos que operaban en el puerto de Barcelona.

Según publica el diario Assabah , la labor de los buceadores consiste en recoger los fardos del fondo del mar y luego cargarlos en embarcaciones de recreo, lejos de los lugares tradicionales, que son los más vigilados. Existe una auténtica “red de buzos”, según el diario, “que se pone a disposición de los capos de la droga, permitiéndoles escapar de la vigilancia de los servicios de seguridad. Estos buzos han sido entrenados especialmente para transportar la droga”, agrega.

Los indicios de la existencia de la red se obtuvieron en una reciente operación de narcotráfico abortada por los servicios de seguridad españoles. El modo de funcionamiento es bastante sencillo. La operación se divide en varias etapas: primero se transporta la droga por vía terrestre en Marruecos a la orilla del Mediterráneo. Luego, es llevada hasta barcos estacionados en distintos puertos. Una vez que se hallan cerca de las costas españolas, se arroja la droga, previamente envasada en barriles y lastrada. Es aquí donde entran en juego los buceadores del lado español que la recogen del fondo marino y luego las transportan a la costa en embarcaciones de recreo, informa Le360.

En abril del año pasado, tal y como informó LA RAZÓN, la Policía Nacional desmanteló una organización de “narcobuzos” afincada en Barcelona, que ya había realizado varios transportes a Europa desde Sudamérica.

Agentes de este cuerpo, entre ellos algunos pertenecientes a los GEOs, detuvieron, en la localidad asturiana de Avilés, a cuatro individuos, tres peruanos y un albanés, que introducían y distribuían grandes cantidades de cocaína en Europa a través de embarcaciones de gran calado, sobre todo los de la compañía MSC dedicada al transporte de contenedores, sin que los propietarios tuvieran conocimiento de ello. Utilizaban un complejo sistema consistente en usar los respiraderos que tienen en el casco las embarcaciones que zarpan desde Sudamérica para ocultar el estupefaciente y posteriormente recuperarlo a su llegada a Europa.

Para llevar a cabo todo el proceso, esperaban que los buques estuvieran atracados en los puertos de origen y, desde una distancia prudente, se introducían en el agua con la sustancia estupefaciente y llegaban buceando hasta el barco. Una vez allí, y sin salir del agua, abrían uno de los huecos que tienen estos buques en la parte inferior del casco. De esta manera, impedían que los controles rutinarios pudieran detectar la presencia de la sustancia estupefaciente. Posteriormente, se alejaban del barco buceando y, al llegar a una distancia segura para ellos, salían a tierra. En todo ese proceso, evitaban emerger a la superficie para no ser detectados.

Una vez que la embarcación zarpaba hacia su destino, esas mismas personas se trasladaban a Europa, en este caso a España, y hacían la misma operación a la inversa. Con este método eran capaces de introducir grandes cantidades de sustancia estupefaciente, que siempre oscilaban en torno a los 100 o los 200 kilogramos, dependiendo de la organización y de la embarcación en cuestión.