Carné de conducir

La Confederación Nacional de Autoescuelas, satisfecha con la nueva reforma de la Ley de Tráfico

La organización avisó en noviembre que el artículo 62 , ya modificado, resultaba “muy lesivo” para los centros de formación vial, al permitir la formación teórica ‘online’ para conductores y que los centros pudieran tener un único local físico con el que operar en toda España.

Los menores de 30 años tendrán ayudas para pagar las tasas del examen de conducir
Los menores de 30 años tendrán ayudas para pagar las tasas del examen de conducirNacho ValverdeIcal

La Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) se ha mostrado satisfecha con la nueva reforma de la Ley de Tráfico, que aprobó definitivamente el Pleno del Congreso de los Diputados este jueves. Tras la votación de las enmiendas introducidas en el texto durante el trámite parlamentario del Senado, CNAE considera “premiados sus denodados esfuerzos en defensa del sector y de la seguridad vial”.

En este sentido, la organización ha recordado que, en primera instancia, la normativa había salido de la Cámara Baja con modificaciones en el artículo 62 y una Disposición Adicional Tercera “muy lesivas” para los centros de formación vial, al permitir la formación teórica ‘online’ para conductores y que los centros pudieran tener un único local físico con el que operar en toda España.

La Confederación avisó a principios de noviembre del “peligro” para la seguridad vial y para los centros de formación que, a su juicio, entrañaba el artículo 62 de la reforma de la Ley de Tráfico. La organización alertó de que la destrucción de la estructura del sector, que el mencionado artículo promovía, “acarrearía un empeoramiento de la formación que reciben los aspirantes a conductores, lo que se traduciría a medio plazo en un aumento de los muertos y heridos graves” en las carreteras.

Rechazaba, entre otras cosas, que sólo se exija un local para operar en todo el país, pues “ello supondría el cierre de miles de autoescuelas y el caos” en los servicios de exámenes de las Jefaturas de la DGT, que “no podrían prever la afluencia de aspirantes”. Además, sostuvo que con la desaparición “masiva” de los centros, se perderían “decenas de miles de puestos de trabajo directos e indirectos, lo cual repercutiría muy negativamente en la situación económica y social, sobre todo de la España vaciada”.

La organización lanzó una campaña con el hagstag #Noal62, en cuyo manifiesto invitaba a los centros de formación vial, a las organizaciones relacionadas con la seguridad vial y a los ciudadanos que lo deseasen a firmar contra el artículo 62 de la nueva Ley de Tráfico porque su redacción “entrañaba la voladura del aprendizaje de la conducción, tal y como lo conocemos hoy”.

En pocos días el manifiesto recibió miles de adhesiones de personas y entidades relacionadas con el sector. Además, logró en un tiempo récord reunirse con todos los senadores de la Comisión de Interior, al objeto de explicarles con todo detalle lo mucho que había en juego desde los puntos de vista de la empleabilidad, sobre todo en la España vaciada, y de la prevención de los siniestros viales. Hasta 15 enmiendas presentadas por diversos senadores estaban inspiradas en el criterio de la Confederación.

El 8 de noviembre la Cámara Alta aprobó la ponencia, que incluía el rechazo a la modificación del artículo 62, y el 17 del mismo mes, se votaron las enmiendas, una de ellas transaccional, la cual plasmaba una Disposición Adicional Tercera que respondía a las propuestas de CNAE, pues vinculaba las clases de concienciación con la enseñanza de la conducción y, además, evitaba el formato enlatado promovido por las plataformas digitales, impulsando el aula virtual como única modalidad a distancia permitida.

Nada más conocerse la noticia, el presidente de la Confederación, Enrique Lorca, declaró visiblemente satisfecho: “Quizá en toda su historia las autoescuelas de nuestro país no se habían enfrentado a un reto tan difícil como este; si hubiésemos fallado, el sector lo habría pasado muy mal, tal vez hubiera desaparecido. Era mucha la responsabilidad de CNAE y el trabajo ha sido ímprobo, pero afortunadamente podemos decir que ha triunfado la razón y que la formación vial en este país tiene futuro. Quiero agradecer su labor y apoyo constante a los presidentes/as de las asociaciones de la Confederación, a nuestros técnicos, a las autoescuelas y, por supuesto, a los partidos políticos que nos han respaldado”.