Sanidad

“Caza de brujas” a los farmacéuticos que no quieran dispensar la píldora del día después

La Ley del Aborto no respeta la objeción de conciencia de los boticarios y plantea sanciones de entre 90.000 y 1.000.000 de euros a quienes no la faciliten

"No podemos despreciar el potencial de estos profesionales que están detrás de más de 22.000 farmacias repartidas por todo el territorio español"
"No podemos despreciar el potencial de estos profesionales que están detrás de más de 22.000 farmacias repartidas por todo el territorio español"Ramon GabrielAgencia EFE

La Ley del Aborto, impulsada por Irene Montero y aprobada este martes por el Gobierno, incluye una cláusula que obligará a las farmacias a dar gratis la píldora anticonceptiva de emergencia -también conocida como píldora del día después- bajo la amenaza de importantes sanciones a los farmacéuticos que se nieguen a dispensarla, con multas de hasta un millón de euros.

En su artículo 7, el texto señala “que se considerarán adecuadas las existencias de métodos anticonceptivos de urgencia para la prestación del servicio en función de la demanda de cada farmacia”, por lo que el farmacéutico no podrá argumentar que no la tiene.

Vulneración de la libertad de conciencia

Una obligación que, a todas luces, vulnera la libertad de conciencia profesional, recogida en el artículo 16 de la constitución. La ministra de Igualdad justificó esta medida en la rueda de prensa posterior al Consejo de ministros -celebrado este martes- argumentando que se debe «acabar con los obstáculos que impiden el ejercicio efectivo del derecho a la interrupción voluntaria del embarazo con la red pública como red de referencia». Con este objetivo, «las mujeres que lo necesiten podrán acceder a la píldora del día después de forma gratuita en los centros de salud y ésta deberá, por supuesto, estar disponible de forma obligatoria en todas las farmacias».

Hasta ahora, la píldora anticonceptiva de emergencia se encontraba en farmacias, y se facilitaba sin receta por un precio de 20 euros.

Según fuentes del Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos (CGCOF), “la redacción actual de la futura ley de interrupción voluntaria del embarazo no contempla expresamente la objeción de conciencia para la dispensación de la píldora del día después, aunque está amparada por el Tribunal Constitucional. Creemos que debe evitarse la judicialización y, en el trámite parlamentario, consideramos que el texto de la futura ley debe incluirla para una mayor seguridad jurídica de los farmacéuticos, mayores garantías para los ciudadanos para asegurar siempre su acceso”.

Medida electoralista

Distinta opinión tienen los propietarios de oficinas de farmacia. “La Ley está fatal hecha porque es una medida electoralista, en un momento de desesperación política de Unidas Podemos”, señala Luis de Palacio, presidente de la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE). “Sospecho que la vamos a tener que impugnar, porque va en contra de legislaciones que ya están bien establecidas, como la Ley del Medicamento y la regulación sobre la dispensación de la píldora del día después sin receta médica, que existe desde hace 12 años, desde la época de Zapatero”.

La regulación a la que se refiere De Palacio es la que establecía que la píldora anticonceptiva de emergencia se dispensara en farmacias, sin receta médica, pese a ser un fármaco con una concentración de principios activos mucho mayor que las píldoras anticonceptivas estándar, que requieren prescripción facultativa.

“Sin meterme en el tema de la objeción de conciencia, a lo que nos obligará la ley es un disparate desde el punto de vista de la salud y la seguridad de la paciente. En las farmacias, llevamos más de 10 años haciendo consejo farmacéutico al dispensar este medicamento, dado que no es inocuo. Tienes que asegurarte de que la persona que te lo está pidiendo no es alérgica a ninguno de los componentes ni está tomando otros fármacos- como una simple aspirina- que puede tener contraindicaciones. Vamos, que, si se la das así porque si, a cualquiera, por defecto, esa persona puede sufrir un trombo, por ejemplo”, destaca.

Sin rastro en la tarjeta sanitaria

Respecto a la gratuidad, destaca que ese punto genera un sinfín de dudas. “¿Qué quiere decir? ¿Qué los laboratorios la van a dar de manera gratuita? ¿Es el farmacéutico el que tiene que asumir el coste? ¿La va a financiar la comunidad autónoma? Es un tema peliagudo, tendría que poder estar en la tarjeta sanitaria- y la añadiríamos los farmacéuticos, algo que hoy por hoy no esta previsto- para que así la administración sanitaria pueda rastrear si una persona la ha pedido 5 veces, o 23″, añade.

Respecto a la obligación de tener suficiente cantidad del fármaco - que regula el Real Decreto Legislativo 1/2015, que recoge las infracciones en materia de medicamentos y considera como infracción «muy grave» que una botica no disponga «de las existencias de medicamentos adecuadas para la normal prestación de sus actividades o servicios»- De Palacios sostiene que nunca se han producido situaciones de desabastecimiento de la píldora anticonceptiva de emergencia. “Es obligar por obligar, esto ya estaba regulado anteriormente y se podía encontrar en cualquier farmacia”.