Cae una banda de georgianos especializada en el robo en viviendas

Estaban asentados en Alcobendas y especializados en el robo con fuerza en domicilios. Se trata de una banda de georgianos que ya ha sido desmantelada por los agentes de la Guardia Civil en el marco de la «operación Lobio», con el resultado de cuatro personas detenidas. Actuaban igual que un grupo desmantelado en octubre e integrado por otros compatriotas: coordinados en cada detalle y conocedores a la perfección de los hábitos de los habitantes de las viviendas seleccionadas. Es decir, que una vez que elegían una vivienda, estudiaban los horarios de sus moradores para establecer posibles momentos de entrada a la casa. Aunque antes de cometer el robo, se aseguraban de que no había nadie en el interior llamando primero al telefonillo.

Para entrar utilizaban los métodos como el «bumping», el «resbalón» o la «ganzua», consiguiendo acceder al interior en pocos minutos. Sin embargo, solían emplear el primer método, que consiste en la apertura de los cilindros de la cerradura utilizando para ello el golpeo de una llave tipo «bump». Los lugares elegidos para robar eran pisos de bloques de viviendas de elevada altura, ubicados en zonas residenciales de clase media. Hasta allí se trasladaba una parte del grupo, siendo uno de ellos el encargado de acceder al lugar, colocando los marcadores de plástico y así saber si la vivienda estaba ocupada o no en el momento de ir a cometer el robo. Para la apertura de la puerta, contaban con expertos en el uso de las prácticas reseñadas, y en pocos minutos lograban hacerse con suculentos botines. Las joyas y el material informático, sin embargo, eran los productos más buscados.

Hasta el momento se les imputa judicialmente la participación en una veintena de hechos delictivos, cometidos en Madrid, Tres Cantos, Las Rozas, Valdemoro, Humanes y Guadalajara, aunque se está investigando su posible vinculación en más de un centenar de hechos.

En los cuatro registros domiciliarios practicados se han intervenido varios kilos de joyas, material informático, los vehículos utilizados para la comisión de los hechos delictivos, documentación falsa, herramientas para la perpetración de los robos y un revólver que en el momento de su intervención estaba cargado.