Industria no cumplirá conlos plazos del dividendo digital

Como un reloj de arena que no cesa, el goteo de información relacionada con la reantenización, que comienza este domingo y finaliza el 31 de diciembre, va enterrando poco a poco las previsiones del Ministerio de Industria. Cuanto más se acerca la fecha tope para que los canales cambien de frecuencia, para dejar libre la banda telefónica 4g, los agentes implicados ven imposible cumplir los plazos, y, si se observa más de cerca, también se decubren las prisas no sólo en lo referente a la parte técnica del proceso, sino para el sencillo hecho de informar al ciudadano de la nueva situación televisiva.

Ayer, el secretario de Estado de Telecomunicaciones, Víctor Calvo-Sotelo, compareció en la Comisión de Industria del Senado para explicar los cambios que los españoles deben acometer este domingo de cara al dividendo digital. Para la mudanza de canales, que se ha establecido entre las 02:00 y las 06:00 horas del domingo, Calvo-Sotelo destacó que existe una hora más –debido al cambio de horario de invierno– para que las cadenas puedan pasar a las nuevas frecuencias (a pesar de que no estaba especificado por el Ministerio en el plan). También reconoció que podía haberse hecho el cambio este viernes, pero al día siguiente se celebra un partido entre el Madrid y el Barcelona y, por ello, «es mejor hacer las cosas en domingo».

«Tormenta perfecta»

El secretario, que reconoció que no «hay problemas de fechas y no es posible adelantar el dinero a las familias por la premura», resaltó que el plan de comunicación puesto en marcha, que contará con dos millones de euros menos de los presupuestados, irá encaminado a comparecencias públicas y a mantener relaciones directas con los afectados. Algo que cuestionan desde Fecotel (Federación Coordinadora de Telecomunicaciones). Su portavoz nacional, José Manuel Muñiz, explica que todo se ha empezado a «hacer tarde» y de momento no ha habido más reuniones que una con información técnica. En las últimas 24 horas y gracias al esfuerzo que han hecho las cadenas por aclarar el cambio del día 26, «se ha despertado un poco la demanda de los usuarios». «Como organización hemos recibido muchísimas llamadas de propietarios y de administradores de fincas y la sensación es de pánico; la perspectiva sigue siendo la misma, que cada día lo vemos peor», asegura Muñiz. El portavoz incluso califica esta semana de «tormenta perfecta», porque a la desafortunada planificación de Industria en cuanto a los plazos –que Facua tildó de imposibles de cumplir–, y a la falta de información a los televidentes («algunos no saben lo que es el dividendo digital y sólo saben que el 26 pueden dejar de ver la televisión», explica Muñiz), ahora ha llegado la confirmación de que «habrá problemas con los suministros porque uno de los tres o cuatro fabricantes principales de los equipos necesarios para la reantenización han informado de que las servirán en enero», cuando ya habrá sucedido el apagón. Y si se opta por otras marcas, «habrá que añadirles elementos adicionales para la compatibilidad entre marcas». Las peticiones se volcarán entonces a otros fabricantes: el temido «cuello de botella» que Industria pretendía evitar. Todo esto ratifica el temor que transmitió Fecotel a este diario acerca de los problemas de existencias de productos si las cosas se hacían sin previsión.