Los colores de un conflicto que tiñó de sangre la historia

Producida por Minoría Absoluta en colaboración con VEO TV, DMAX recupera del olvido los colores de un conflicto que tiñó de sangre la historia de España.

Un conflicto social, político y bélico, que más tarde repercutiría también en una crisis económica. Así fue la Guerra Civil española tras un fracaso parcial del golpe de Estado de 1936 contra la II República. Una Guerra que terminaría 3 años más tarde con el último parte de guerra firmado por el General Francisco Franco, que declaraba su victoria estableciéndose como jefe de una dictadura que duraría hasta su muerte en 1975.

Una contienda que dividió un país en dos bandos arrasando con todo a su paso. España dejaba atrás un país destruido tras 40 años de totalitarismo seguidos de un periodo de transición hacia un sistema democrático, incapaz de curar las heridas de un pasado reciente que ocupa un importante lugar en nuestras memorias. Ahora, 80 años después, es tiempo de mirar atrás sin rencor y contar lo ocurrido bajando el pistón partidista con el que siempre se ha mirado la Guerra Civil.

Producida por Minoría Absoluta en colaboración con VEO TV, DMAX recupera del olvido los colores de un conflicto que tiñó de sangre la historia de España. El canal se atreve a mirar con perspectiva los recuerdos de un conflicto grabado en nuestras retinas con el estreno de “España dividida: La Guerra Civil en color”, un emocionante proyecto que saldrá a la luz esta noche a partir de las 22:30 horas con el primero de los tres episodios que componen la entrega.

Francesc Escribano y Luis Carrizo, directores del proyecto, quisieron–tuvieron que ir más allá de los Pirineos para dar con su hombre: Antony Beevor, una de las mayores figuras internacionales alrededor de la Guerra Civil y que ha sido el encargado de guiar el proyecto que presenta nos presenta el canal hacia un lugar lejos de las sospechas.

Nos hemos acostumbrado a ver la vida en blanco y negro pero DMAX sabe cómo contar la historia de nuestro país como nunca antes se había visto. Gracias a modernas técnicas de coloreado de las imágenes que sobrevivieron a la batalla y al paso del tiempo, la serie ofrece una nueva perspectiva a través de imágenes en color. Y es que, tal y como afirma Escribano, “El color tiene ese efecto que hizo como si fuera la primera vez que veíamos las imágenes”. Un recuerdo muy emocionante para todo el equipo encargado del proyecto que ha intentado “contar qué paso y cómo dejando a un lado las ideologías”.

Más de 2.000 horas de edición, 30.000 planos seleccionados, 3.000 planos editados y más de 15.000 fotogramas coloreados a lo largo de 8 meses de trabajo. Un conjunto de “pequeñas cosas que hacen de ello un contenido que vas a querer tener en tu casa” apunta el encargado de producción Jordi Marqués.

La mayor parte del original empleado procede del fondo de la Filmoteca Española, combinado con secuencias procedentes de archivos de otras instituciones nacionales e internacionales, un material adicional de "cuatro minutos de valor incalculable", que según recalco Marqués, procede de los archivos de la CNT.

Un retrato del pasado que, como bien define Escribano, es “Pasión. La sensación común de estar haciendo algo nuevo con mucho esfuerzo, pero sobre todo, con mucha pasión”. Un gran trabajo documental, un trabajado coloreado y un sonido creado de cero, unos elementos que “han sido el éxito de la serie”.