Lenguaje

El inglés, objeto de deseo y pesadilla

España se sitúa en el puesto 32 de una relación de 88 países sobre el dominio del inglés. Eso sí, estamos a la cola de Europa. Como consuelo, lo hablamos mejor que italianos y franceses

El inglés, objeto de deseo y pesadilla
El inglés, objeto de deseo y pesadillalarazon

España se sitúa en el puesto 32 de una relación de 88 países sobre el dominio del inglés. Eso sí, estamos a la cola de Europa. Como consuelo, lo hablamos mejor que italianos y franceses.

En un mundo digital, donde priman los dispositivos electrónicos con acceso a internet y con herramientas de traducción automática, aprender idiomas no parece ser necesario. Sin embargo, ocurre todo lo contrario. Pese a constituir una necesidad y un plus en el día a día, el inglés continúa costando en gran medida a los españoles. El 44% reconoce que su nivel es bajo o muy bajo y solo uno de cada cuatro afirma tener la fluidez suficiente para poder mantener una conversación. Nuestro país se sitúa en el número 32 de una lista de 88 países sobre el dominio de la lengua británica.

A pesar de que más de la mitad de la población española mantiene un manejo medio, o eso dice, y de que estamos por encima de nuestros vecinos Italia y Francia, el inglés tiene un largo camino que recorrer en España. Lo cierto es que muchos de los que no lo controlan son capaces de comunicarse utilizando el «spanglish» con un poco de picardía, pero no es suficiente. Actualmente, una de cada cuatro empresas exige al menos un nivel medio de inglés para trabajar. Es así, el de Shakespeare sigue siendo el rey de los idiomas, el más demandado para conseguir empleo y cada día se hace más imprescindible. Un 41% admite haber perdido oportunidades laborales al no saber inglés y el 87% afirma que su manejo te abre muchas puertas al mercado de trabajo.

Pero entonces, ¿por qué los españoles no nos esforzamos en su aprendizaje? ¿Cuál es la razón de este bloqueo? La vergüenza es la mayor traba. Un 93% de los profesores afirma que el miedo a equivocarse o pronunciar mal es lo que desmotiva a gran parte de la población, que acaba optando por no practicarlo, ya que no hay nada cognitivo o fisiológico que impida aprender inglés a cualquier edad.

Nuestro país sigue estancado en los puestos más bajos de Europa con un control muy básico. Desde 2013 España ha ido subiendo y bajando sus cifras en el ranking, pero a partir de 2015, se estancó. Respecto a las comunidades autónomas, Navarra y Madrid dan la talla. La peor nota es para Extremadura.