Cambios climáticos

«Expedición Oceanía»: los soldados que buscan salvar el planeta

Se busca a jóvenes de entre 20 y 30 años para una expedición que recorrerá 36 países por mar y tierra para concienciar en los objetivos fijados por la ONU sobre medio ambiente.

La vida de capitán de navío, es la vida mejor
La vida de capitán de navío, es la vida mejorlarazon

Se busca a jóvenes de entre 20 y 30 años para una expedición que recorrerá 36 países por mar y tierra para concienciar en los objetivos fijados por la ONU sobre medio ambiente.

En tiempos donde el deshielo del Ártico es ya una terrible y casi irremediable realidad, con un aumento de temperatura constante que trae olas de calor a nivel mundial (acabamos de vivir el mes de julio más caluroso de la historia), y con un continente de basura aflorando y destruyendo los ecosistemas marinos, la sociedad debe reaccionar y dar un paso adelante.

Con la intención de concienciar al mayor número posible de personas sobre la importancia de tomarse en serio la protección del medio ambiente ha nacido el proyecto «Oceania, Expedición Mar Azul», una iniciativa que busca a jóvenes valientes que demuestren que todavía estamos a tiempo de salvar el planeta. Chicos y chicas que se quieran embarcar en una aventura para dar así un vuelco a su cotidianidad, cambiar sus vidas y las de todos. Lo harán a bordo del velero Aquarela, que recorrerá 36 países y partirá desde Sagres, Portugal, el próximo 3 de noviembre.

Aunque los interesados deben inscribirse cuanto antes (aún tienen 15 días para hacerlo) y pasar un periodo de selección. Recorrerán los océanos de medio mundo con el objetivo de «tener una visión en positivo sobre el futuro del planeta, y esa visión empieza en nosotros». Para llevarlo a cabo se necesita un cambio en nuestras conductas. Cuidar de nuestro mundo es responsabilidad de todos, no solo de los políticos», señala Anabel Merino, directora de comunicación de Oceania.

A pesar de su reciente lanzamiento al público, este proyecto lleva tiempo preparándose y nace con la idea de recorrer el planeta y así poder tratar los 17 puntos fijados por la ONU que conforman la llamada Agenda 2030 un listado de objetivos a cumplir por los países miembros de la Organización.

Así, con el objetivo de debatir cuestiones para lograr un mundo más sostenible, Oceanía Expedición Mar Azul es un viaje que juntará a jóvenes con ganas de convivir y compartir conocimientos y experiencias. Todo ello delante de los focos y cámaras que serán testigos de los vínculos sociales que se tracen. Porque de todo esto saldrá un documental que dará cuenta de lo que es un viaje de estas dimensiones, algo que podría echar para atrás a muchos, pero que no será sino una motivación más para los tripulantes del barco.

En esta primera fase de casting, abierto hasta el día 31 de agosto, los participantes que quieran ser los héroes de esta aventura deben entrar en la página web de Oceania y seguir las instrucciones para inscribirse.

Más de 11.000 participantes ya han mostrado su interés en esta propuesta de cambio: jóvenes de entre 20 y 30 años con un alto nivel de inglés y con titulación universitaria. Pero no solo importa lo que digan, sino cómo lo digan, pues las dotes comunicativas son una aptitud más que fundamental para ser uno de los privilegiados «Odsiders» –los tripulantes que luchen por los objetivos de desarrollo sostenible–. A esto se le suma cierto bagaje intelectual, pues la Agenda 2030 no es un tema baladí y solo los mejores pueden conseguir convencer a dirigentes y comunicadores de la importancia de cumplir los objetivos.

En busca de héroes anónimos

En definitiva: gente que ame lo que hace, que quiera transmitirlo, una combinación de pasión y conocimientos al servicio de un proyecto enfocado a cambiar el mundo. Idiomas, viajes, vivencias... Todo suma para hacer del candidato elegido, sea del lugar que sea, el próximo tripulante de esta aventura. Primero hay un primer filtro, con un vídeo de un minuto donde se hable en inglés y español y se muestre las inquietudes e intereses de la expedición, haciendo una breve presentación del candidato. Tras seleccionar alrededor de un centenar de aspirantes, se hará un casting presencial, reduciendo la lista en cerca de 30 aspirantes. En una nueva entrevista presencial, el director de la expedición será quien tenga la última palabra.

Aunque la colaboración con Oceanía no se limita a subirse un barco que recorre el mundo. Es mucho más que eso. Es por ello que se quiere contar con multitud de empresas y particulares que, a pesar de no cumplir con esos requisitos de edad y titulación, estén dispuestos a aportar su granito de arena: «No queremos excluir a nadie, aquellos héroes anónimos que puedan aportar respuestas a estos objetivos también pueden ayudar», señala Merino. Con un total de 36 países –y 80 zonas en cada uno que recorrer–, el proyecto cuenta ya con el apoyo del Gobierno, del Alto Comisionado, con el apoyo del Consejo General de Colegios de Oficiales de Químicos y Biólogos, y con el Colegio de Geólogos de España. A ellos se suman la Comunidad por el Clima y Ecodes, una organización que lucha por la sostenibilidad. El Colegio Oficial de Físicos ha sido el último en sumarse al proyecto.

La primera parte de esta intrépida expedición recorrerá el planeta navegando de este a oeste a lo largo del ecuador. El velero «Acuarela» llevará a la tripulación por este recorrido. La segunda parte de la expedición será por vía terrestre, de norte a sur y liderada por Jordi Tosas, uno de los mejores alpinistas y escaladores del mundo. Objetivos como la igualdad de género o la educación son temas fundamentales a tratar, aunque algunos son más complejos que otros. «Se busca abarcar todos los puntos y que vayan coordinados y entrelazados», destaca Merino. 30.000 millas náuticas en las que se entablarán diálogos y relaciones entre científicos, agentes económicos, políticos y líderes socioculturales de todo el mundo que puedan aportar soluciones factibles con esa meta de sostenibilidad como guía.

De forma paralela a la gran aventura de la travesía por el mundo, se está trabajando en cuatro bloques que sirvan para mostrarlo al público. Sergio Oskman, galardonado con un Goya al Mejor Cortometraje Documental 2013, dirigirá una serie documental del proyecto narrando el viaje de los protagonistas por el Ecuador y de norte a sur. Pero eso no es todo, y es que también saldrá a televisión una serie de ficción a cargo de Alejandro Bazzano, el creador de «La Casa de Papel» y ganador de un premio Emmy.En ella, se plasmará como será la vida en el planeta en el año 2030 si la sociedad no es capaz de abordar los cambios sostenibles. Este proceso de visibilización de Oceania continuará con un proyecto musical en el que cientos de músicos internacionales darán ritmo al «soundtrack» de la Agenda 2030, con un disco compuesto por 17 canciones dedicadas a los objetivos sostenibles. Por último, y con el meteorólogo español y doctor en Ciencias de la Atmósfera, Mario Picazo, se lanzará una serie de formatos televisivos basados en los Objetivos de Desarrollo sostenible. A esta serie también se ha sumado recientemente el actor y humorista José Mota.

Por todo esto, para Merino «Oceanía no es solo un barco que recorre el mundo y un documental sobre la travesía. Es un proyecto de vida». De esta manera queda de manifiesto que esta aventura trae al panorama social sostenible una bocanada de aire fresco, un anhelo esperanzador que busca convertirse en una realidad. Es la oportunidad de cambiar la sociedad y transformarla en una más justa.

Los aventureros que quieren embarcarse en este periplo sin precedentes parecen tenerlo claro. Isabel Moya, una de las candidatas a subirse al barco que cambiará su perspectiva vital lo ejemplifica así: «Es un proyecto diferente. Tengo la oportunidad de hacer un cambio en el mundo, por pequeño que sea. Existen personas que, a la hora de expresarse, a la hora de tratar contigo, lo hacen desde la superioridad, cuando en realidad somos todos iguales». Cambio, justicia, igualdad.

Una nueva forma de afrontar la realidad para hacerla más sostenible es posible. Marcar unas pautas que puedan cambiar nuestros comportamientos y hábitos para que podamos empezar el tan ansiado cambio que este planeta necesita. Eso es Oceanía. Solo queda por ver si los valientes que suban a ese barco son capaces de «dar la vuelta al mundo».