El espectacular resultado del mayor trasplante de rostro de la historia

La operación del bombero se prolongó durante 26 horas y participaron 100 profesionales. Patrick Hardison quedó desfigurado en 2001 durante un incendio.

El bombero voluntario Patrick Hardison quedó totalmente desfigurado durante un incendio en 2001, pocos días antes de los atentados contra las Torres Gemelas. Durante una operación de rescate, el techo de una casa cató sobre él y perdió los párpados, las orejas, los labios, la mayor parte de la nariz, el pelo y las cejas... Pero sobrevivió. En 2014 le comunicaron que le iban a hacer un trasplante completo de cara. La cirugía se realizó en el centro médico NYU Langone el pasado mes de agosto, en la que participaron 100 profesionales durante 26 horas.

Eduardo Rodríguez, jefe del departamento de cirugía plástica del hospital, comenzó a preparar la cirugía en 2013 y finalmente y con ayuda de su equipo logró darle un rostro a Hardison, otro cuero cabelludo, orejas, canales auditivos y algunos huesos nuevos para la barbilla, pómulos y nariz. También le proporcionó nuevos párpados y músculos que controlan el parpadeo. Hardison no podía cerrar completamente los ojos.

El paciente llegó hasta el doctor Rodríguez después de más de 70 cirugías previas, pero tuvo que esperar un año hasta que apareciera un donante con la edad, el peso, la altura y la piel adecuados. También debía tener una estructura ósea similar y era necesario contar con el acuerdo de la familia. Esta conjunción de situaciones se dio en agosto, cuando David Rodebaugh, un ciclista de 26 años que vivía en Brooklyn, falleció en un accidente de tráfico y su madre aceptó donar sus órganos.

El costo estimado del trasplante ronda el millón de dólares pero fue asumido por el propio hospital. El médico dijo que le había dicho a Hardison que la probabilidad de que la operación fuera exitosa era de un 5 por ciento%, porque quería que el paciente entendiera "el gran riesgo que significa participar en este procedimiento experimental".

Los trasplantes de rostro se han vuelto cada vez más frecuentes en los últimos años. El primer trasplante facial parcial del mundo fue practicado por médicos franceses en 2005, en una mujer que había sido ferozmente atacada por su perro.

En marzo pasado, el hospital universitario Vall d'Hebrón de Barcelona, España, informó que había practicado exitosamente lo que llamó entonces el trasplante facial más complejo hasta la fecha: consistió en la reconstrucción de la parte baja del rostro, cuello, boca, lengua y garganta de un hombre anónimo terriblemente desfigurado por una enfermedad. Esa operación reconstruyó dos tercios del rostro del hombre de 45 años. En 2010, el mismo hospital practicó el primer trasplante facial total en un hombre que sufrió un accidente que lo dejó sin nariz y deformó su mandíbula y pómulos.

Rodríguez dijo que la operación de Nueva York logrará que los futuros trasplantes faciales sean más seguros y tengan mejores resultados. También afirmó que su cirugía prueba que el cuero cabelludo puede ser trasplantado completamente, junto al rostro.

Medicación de por vida

El trasplante de párpados en particular "supone una gran esperanza para las personas que los han perdido", indicó el doctor Rodríguez, que también destacó que se trató del mayor trasplante de tejido facial que se ha practicado hasta ahora, puesto que debió retirar todo el tejido dañado de Hardison para que el resultado fuera lo más natural posible.

"Estoy profundamente agradecido a mi donante y a su familia", dijo Hardison en un comunicado. "Espero que vean en mí la bondad de su decisión. También quiero agradecer al doctor Rodríguez y su extraordinario equipo. Me han dado más que una nueva cara. Me han dado una nueva vida", añadió.

Tres meses después de la operacion, Hardison ha retomado de forma parcial su rutina diaria, pero deberá tomar medicamentos inmunosupresores el resto de su vida y deberá someterse a controles mensuales en Nueva York. De momento, deberá a prender a vivir con su nuevo rostro hasta que a principios de 2016 vuelva a pasar por el quirófano para ajustarle mejor el tejido periférico de los ojos y los labios. De momento, no ha logrado retomar la alimentación sólida y tiene que hacerlo a través de un tubo pero los médicos han aumentado la cantidad de alimento de cada ingesta de productos "normales".

Lejos quedan esos días en los que debía colocar una prótesis en sus orejas pero el camino que le queda por delante será duro. Eso sí, Hardison ha recuperado su vida y pronto podrá volver a cerrar completamente los ojos, 14 años después de la última vez.