Con el aumento de las temperaturas y las lluvias de primavera, las malas hierbas encuentran el ambiente perfecto para crecer con fuerza en jardines, patios y caminos. Aunque su presencia es común, dejarlas sin control puede afectar gravemente a las plantas cultivadas, restar belleza a los espacios exteriores y atraer plagas no deseadas.

Por suerte, eliminar las malas hierbas ya no tiene por qué ser una tarea agotadora. Expertos en jardinería recomiendan varios métodos caseros y sostenibles que pueden ayudarte a mantener tus espacios verdes en perfecto estado sin grandes esfuerzos.

Así puedes eliminar las malas hierbas

Uno de los trucos más sencillos es el uso de vinagre blanco, que actúa como herbicida natural. Aplicarlo directamente sobre las hierbas no deseadas en días soleados puede marchitarlas en pocas horas. Otro método eficaz es la cobertura del suelo con cartón o una capa gruesa de mantillo, lo que bloquea la luz solar e impide que las semillas germinen.

También es recomendable arrancar las malas hierbas justo después de la lluvia, cuando la tierra está más blanda y las raíces salen con mayor facilidad. Para quienes buscan soluciones aún más prácticas, existen herramientas ergonómicas que permiten extraer las hierbas sin agacharse ni hacer fuerza.

En definitiva, este es el mejor momento del año para tomar el control del jardín y eliminar las malas hierbas antes de que se apoderen del espacio. Con los métodos adecuados, podrás disfrutar de un entorno limpio, saludable y lleno de vida, sin que suponga una carga.