Cambio climático

Las muertes relacionadas con el calor aumentarán un 370% en los próximos años, según un estudio de The Lancet

La octava actualización de un importante informe internacional muestra que cada vez más personas enferman y mueren a causa del calor extremo, la sequía y otros problemas climáticos.

En la imagen, la playa del Postiguet, en Alicante, este 14 de noviembre
En la imagen, la playa del Postiguet, en Alicante, este 14 de noviembreAgencia EFE

Nuevas proyecciones revelan la amenaza catastrófica que supone para la salud y la supervivencia de miles de millones de personas en todo el mundo, así como para el éxito de los esfuerzos de adaptación, cualquier nuevo retraso en la adopción de medidas para limitar el aumento de la temperatura a 1,5 °C por encima de los niveles preindustriales, según afirma el Informe 2023 de 'The Lancet Countdown on Health and Climate Change' publicado este miércoles. Si la temperatura media global sigue aumentando hasta un poco menos de 2 °C, se prevé que las muertes anuales relacionadas con el calor aumentarán un 370% hacia mediados de siglo.

"Nuestro balance sanitario revela que los crecientes peligros del cambio climático están costando vidas y medios de subsistencia en todo el mundo. Las proyecciones de un mundo 2 °C más cálido revelan un futuro peligroso, y son un sombrío recordatorio de que el ritmo y la escala de los esfuerzos de mitigación vistos hasta ahora han sido lamentablemente inadecuados para salvaguardar la salud y la seguridad de las personas", afirma la doctora Marina Romanello, Directora Ejecutiva de Lancet Countdown en el University College de Londres (Reino Unido). "La inacción tiene un enorme coste humano, y no podemos permitirnos este nivel de desinterés: lo estamos pagando con vidas -recuerda-. Cada momento que nos demoramos hace que el camino hacia un futuro habitable sea más difícil y que la adaptación sea cada vez más costosa y desafiante".

El Informe 2023 de Lancet Countdown, dirigido por el University College de Londres, se basa en la experiencia de 114 científicos y profesionales de la salud de 52 instituciones de investigación y agencias de las Naciones Unidas de todo el mundo, incluidas la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Meteorológica Mundial (OMM), y ofrece la evaluación más actualizada de los vínculos entre salud y cambio climático. Publicado antes de la 28ª Conferencia de las Partes (COP) de las Naciones Unidas, el informe presenta 47 indicadores que incluyen nuevas y mejores métricas que vigilan la contaminación del aire en los hogares, la financiación de los combustibles fósiles y el compromiso de las organizaciones internacionales con los beneficios colaterales para la salud de la mitigación del cambio climático.

Por primera vez, el informe de este año ofrece una visión inquietante de lo que podría deparar un mundo que se calienta. Las nuevas proyecciones, elaboradas con el apoyo del Foro sobre la Vulnerabilidad Climática (CVF), ponen de manifiesto el rápido aumento de los riesgos para la salud de la población si no se alcanza el objetivo de 1,5 °C. Todos los riesgos para la salud analizados por The Lancet Countdown empeorarán si las temperaturas aumentan hasta los 2 °C a finales de siglo. En este escenario, prevén que las muertes anuales relacionadas con el calor aumentarán en un 370% a mediados de siglo, y que la exposición al calor incremente en un 50% las horas de trabajo potencialmente perdidas en todo el mundo. También se prevé que las enfermedades infecciosas potencialmente mortales se extiendan aún más a mediados de siglo.

El fracaso a la hora de mitigar seriamente el cambio climático es evidente, ya que las pérdidas y los daños relacionados con la salud se están disparando en todo el mundo. Las muertes relacionadas con el calor en personas mayores de 65 años aumentaron un 85% en 2013-2022 en comparación con 1991-2000, sustancialmente por encima del aumento del 38% esperado si las temperaturas no hubieran cambiado (es decir, teniendo en cuenta solo los cambios demográficos). "Todavía hay lugar para la esperanza -asegura la doctora Romanello-. Si las negociaciones sobre el clima impulsan una eliminación equitativa y rápida de los combustibles fósiles, aceleran la mitigación y apoyan los esfuerzos de adaptación para la salud, las ambiciones del Acuerdo de París de limitar el calentamiento global a 1,5 °C son aún alcanzables, y un futuro próspero y saludable está al alcance de la mano".

El informe resalta que las alarmantes estadísticas de olas de calor y sequías más frecuentes fueron responsables de que 127 millones más de personas sufrieran inseguridad alimentaria de moderada a grave en 122 países en 2021, en comparación con las cifras anuales observadas entre 1981 y 2010. De manera similar, se está acelerando la propagación de enfermedades infecciosas potencialmente mortales. Por ejemplo, los mares más cálidos han aumentado en 329 kilómetros cada año desde 1982 la superficie de la costa mundial apta para la propagación de la bacteria Vibrio, que puede provocar enfermedades y la muerte en seres humanos, lo que ha puesto a 1.400 millones de personas en riesgo de sufrir enfermedades diarreicas e infecciones graves de heridas, una cifra récord. y sepsis. La amenaza es particularmente alta en Europa, donde las aguas costeras aptas para Vibrio han aumentado en 142 kilómetros cada año.

Estos crecientes riesgos del cambio climático también están empeorando las desigualdades sanitarias mundiales. Los sistemas de salud están cada vez más bajo presión y el 27% de las ciudades encuestadas declararon su preocupación por el hecho de que sus sistemas de salud se vean abrumados por los impactos del cambio climático. "Ante proyecciones tan nefastas, la adaptación por sí sola no puede hacer frente a los impactos del cambio climático, y los costes se están volviendo rápidamente insuperables", afirma la profesora Stella Hartinger, Directora del Centro Regional para América Latina de The Lancet Countdown. "Debemos ir más allá del tratamiento de los síntomas sanitarios del cambio climático para centrarnos en la prevención primaria -advierte-. Hay que abordar las causas profundas del cambio climático acelerando rápidamente la mitigación en todos los sectores para garantizar que la magnitud de los peligros para la salud no supere la capacidad de adaptación de los sistemas sanitarios. A menos que los gobiernos empiecen de una vez a actuar ante estas advertencias, las cosas empeorarán mucho, mucho".