Igualdad

Políticas marroquíes, en contra de su escasa representación en el debate del nuevo Código de Familia

Consideran que se les excluye de un asunto de vital importancia

Imagen de archivo de mujeres marroquíes haciendo cola para conseguir un puesto de trabajo como temporeras en Huelva
Imagen de archivo de mujeres marroquíes haciendo cola para conseguir un puesto de trabajo como temporeras en Huelva larazonAgencia EFE

“Los partidos políticos marroquíes han demostrado, una vez más, un flagrante déficit de democracia”, al menos en lo que a representación de la mujer en debates cruciales como la reforma del Código de Familia. Así lo informa el diario “Assabah”, que evoca una guerra interna en el seno de los grupos políticos. No supieron gestionar la presentación de sus propuestas para la reforma del Código de Familia ante la comisión específica, recoge Le360.

Las activistas de algunos partidos protestaron así contra lo que consideraban un “control masculino” sobre la gestión de este asunto. En otras palabras, un enfoque machista cuyo objetivo oculto, subraya el diario, sería protegerse de las corrientes hostiles a la dirección actual de la carrera por la dirección del partido.

El periódico menciona el caso específico de una ex ministra conocida por su activa participación en el debate sobre el texto de dicho Código de Familia. No fue invitada a formar parte del equipo que presentó el ejemplar de su partido ante el órgano encargado de la revisión. Evidentemente –agrega-- se trata del PPS y no es otra que la ex ministra de Desarrollo Social del gobierno de El Fassi, Nouzha Skalli.

Según "Assabah" , otras militantes de partidos políticos intentaron hacerse oír utilizando otros canales para eludir la prohibición que se les había impuesto de expresar su opinión sobre el tema. Interrogados sobre esta cuestión, los dirigentes de algunos grupos justificaron la elección de los miembros de su delegación según varios criterios. Criterios que se relacionan con la naturaleza misma de la reforma que debe responder a tres principios: libertad de elección, equilibrio entre derechos y deberes y complementariedad frente a cargas y responsabilidades. No parecen razones de pese para excluir a las mujeres del debate, todo lo contrario.

Dicho esto, continúa el diario, el organismo encargado de revisar el Código de la Familia no dudó en crear una dirección electrónica oficial para permitir a las instituciones, asociaciones y organizaciones políticas y sindicales, así como a los distintos actores, presentar sus propuestas y visiones respecto a la reforma. Y ello, con el fin de contribuir a la consecución de los objetivos marcados por la Real Carta al respecto.

El establecimiento de esta dirección electrónica se lleva a cabo como parte de un enfoque participativo a gran escala. Este método complementa las audiencias organizadas durante varias semanas para escuchar a asociaciones, grupos asociativos e instituciones constitucionales.

Al poner esta herramienta a disposición de los actores interesados, concluye “Assabah”, se pretende ampliar el ámbito de participantes en este proyecto social para incluir a aquellos que no pueden ser entrevistados directamente por diferentes razones.