Un agosto sin olas de calor

El mes de agosto transcurrirá con temperaturas normales para esta época del año, e incluso con valores ligeramente inferiores en algunos lugares de España, de manera que no se prevén olas de calor, mientras que las lluvias también se enmarcarán dentro de los registros normales y serán ligeramente superiores algunos días y en zonas determinadas.
La Aemet considera ola de calor cuando durante al menos tres días consecutivos el 10% de las estaciones meteorológicas de una zona registran máximas por encima del percentil del 95% de su serie de temperaturas máximas diarias de los meses de julio y agosto del periodo entre 1971 y 2000, y esta situación aún no se ha producido en esta época estival.
Este verano sólo ha registrado un episodio de temperaturas altas entre el 14 y el 18 de julio, cuando los termómetros llegaron hasta los 42,2 grados en Montoro (Córdoba).
La portavoz de la Aemet, Ana Casals, señaló este viernes, en declaraciones a Servimedia, que este verano no se ha registrado aún ninguna ola de calor y que julio acabó con 0,2 grados por debajo de la media. "La predicción estacional para agosto, septiembre y octubre es que las temperaturas no se van a separar mucho de los valores normales, aunque serán algo superiores en el este peninsular y normales en el resto de España", apuntó.
Agosto ha comenzado con la entrada de un frente que dejará lluvias y tormentas en el noreste peninsular, y habrá chubascos y tormentas en el tercio norte peninsular, que pueden ser localmente fuertes en el oeste de Galicia y con mayor probabilidad en los Pirineos, Cataluña, norte y este de Aragón y norte de Castellón.
Las temperaturas descenderán moderadamente este sábado en buena parte del interior peninsular y soplarán intervalos de viento fuerte del oeste en el mar de Alborán.
El domingo mejorará la situación. La inestabilidad se irá desplazando y hay probabilidad de precipitaciones en el extremo norte peninsular y el litoral de Cataluña y de Levante. El resto de la península estará poco nuboso, con algún intervalo nuboso en zonas de los tercios norte y este. Las temperaturas subirán ligeramente, salvo en el Cantábrico y en el Levante.
ESTABILIDAD
Por otro lado, Casals apuntó que la próxima semana comenzará con más estabilidad, de manera que hay posibilidad de precipitaciones, débiles en general, en el extremo norte peninsular, que podrían ser localmente fuertes en los Pirineos durante el martes, en tanto que las temperaturas subirán el lunes y el martes de forma ligera a moderada en la península y Baleares.
"Las temperaturas no subirán tanto el domingo y el lunes como han bajado el viernes y el sábado. No esperamos grandes calores y a final de la próxima semana serán incluso un poco más bajas. Los 40 grados no se van a dar", apostilló.
En líneas generales, la Aemet espera que las temperaturas sean del 4 al 10 de agosto ligeramente inferiores a los registros normales en el noreste y sureste peninsulares y en Baleares, y normales en el resto de España. En las dos semanas siguientes, hasta el día 24, prevé que las temperaturas "se sitúen en torno a sus valores habituales para estas fechas".
Por lo que respecta a las precipitaciones, la semana del 40 al 10 de agosto estarán dentro de los registros normales en toda España, salvo en los Pirineos, Canarias y Baleares, que podrían ser ligeramente superiores a las normales, y en las dos siguientes semanas probablemente estén en sus valores normales.