
Inteligencia Artificial
David Sacks, zar de la IA de la Casa Blanca, hunde a las empresas de inteligencia artificial: "No habrá rescate federal"
Los avances en material de inteligencia artificial son cada día más patentes, como lo es el aumento en las inversiones y por ende el riesgo a una crisis que pueda acabar con proyectos del sector
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La visión de David Sacks en el sector tecnológico hace años que lo convirtió en una referencia. Su papel impulsor para la creación de PayPal, así como sus inversiones tempranas en compañías como Facebook, Uber, SpaceX o Airbnb demuestran una capacidad casi innata para ver los proyectos que apuntan al éxito.
De igual modo, toda la experiencia que aglutina, tanto a la hora de analizar proyectos como desde que cofundara la firma de capital riesgo Craft Ventures, además de en el mundo de las criptomonedas, le valió la designación por parte de la administración de Donald Trump para hacerse cargo de la política gubernamental en materia de inteligencia artificial y de criptomonedas.
Fue el propio Donald Trump quien se refirió al cargo de Sacks, de 53 años, como el de “zar de la inteligencia artificial y las criptomonedas”, tratando de dar peso a su apuesta por estos dos sectores con su regreso a la Casa Blanca. Un regreso que ha coincidido con el auge más pleno de la inteligencia artificial, en la que los rumores de posible burbuja comienzan a asomar, cuestión ante la que Sacks ha querido dejar clara la postura gubernamental.
El gobierno de EE.UU no será la red de seguridad de la IA
Y lo ha tenido que hacer después de unas declaraciones de Sarah Friar, directora financiera de OpenAI, la compañía detrás de ChatGPT. En ellas, Friar, que participaba en el evento Tech Live organizado por el periódico estadounidense The Wall Street Journal, señaló que a OpenAI sondeaba la posibilidad de contar con socios gubernamentales y que estaban “buscando un ecosistema de socios bancarios y capital privado, quizá incluso gubernamentales”.
Friar se vio en la necesidad de salir a aclarar dichas declaraciones, y David Sacks, como cabeza visible de dicha área en el gobierno de Donald Trump, también apuntó a través de su perfil oficial en ‘X’ que el papel de Estados Unidos no será el de salvavidas ante un fracaso de alguna firma de cuantas se encuentran inmersas en el desarrollo de la IA, en clara alusión a las palabras de Friar:
“No habrá rescate federal para la IA. Estados Unidos cuenta con al menos cinco empresas líderes en modelos de vanguardia. Si una fracasa, otras la reemplazarán.”
Lo que sí puntualizó Sacks en el hilo publicado, fue que el trabajo de la Administración irá en la línea de facilitar la obtención de permisos para la construcción de la infraestructura necesaria para el desarrollo de la IA en centros de datos, además de para la generación de energía, cuestión en la que China, histórico rival, cuenta con ventaja en este momento.
No obstante, David Sacks remató su aclaración sobre el tema descartando la posibilidad de que la responsable económica de OpenAI estuviera poniendo sobre la mesa la cuestión de un rescate financiero: “Finalmente, para conceder el beneficio de la duda, no creo que nadie estuviera pidiendo realmente un rescate financiero”, destacó en su hilo Sacks.
Un desmentido que, como suele decirse, puede ser la antesala de la noticia o una mera aclaración con la que despejar los rumores. Sea como sea, lo cierto es que la presencia de la palabra burbuja en torno a la inteligencia artificial parece estar más presente que nunca.
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