Inteligencia artificial

Alerta privacidad: usan las gafas Ray-Ban de Meta para ‘doxear’ al instante a cualquiera que registren

La demostración realizada por dos estudiantes de Harvard, usando inteligencia artificial, resalta los peligros para la privacidad de dispositivos como las gafas inteligentes

Mark Zuckerberg speaks about the Ray-Ban Meta smart glasses during the Meta Connect conference Wednesday, Sept. 25, 2024, in Menlo Park, Calif. (AP Photo/Godofredo A. Vásquez)
Mark Zuckerberg, durante la presentación de las novedades en las gafas Ray-Ban en el pasado Meta Connect.ASSOCIATED PRESSAgencia AP

Dos estudiantes de Harvard han creado una demostración de cómo las gafas inteligentes pueden usar tecnología de reconocimiento facial para revelar instantáneamente datos personales como el nombre, número de teléfono y dirección de quien se ponga delante de ellas y pueda ser registrado. Lo más llamativo es que utiliza tecnología de consumo ampliamente disponible, como son las gafas Ray-Ban de Meta, y bases de datos públicas, para ‘doxear’ a otras personas.

El término ‘doxear’ proviene de ‘dox’, una abreviación en inglés de ‘documents’. Se refiere a la práctica de revelar y difundir públicamente información personal y privada de una persona, como su nombre completo, dirección, número de teléfono, lugar de trabajo o incluso datos financieros, sin su consentimiento.

AnhPhu Nguyen, uno de los dos estudiantes, publicó un video mostrando la tecnología en acción y del que se ha hecho eco 404 Media. Apodada I-XRAY, la tecnología funciona usando la capacidad de las gafas inteligentes de Meta para transmitir video en vivo a Instagram.

Un programa que corre en un ordenador se encarga de monitorear esa transmisión y utiliza inteligencia artificial para identificar rostros. Esas fotos se introducen en bases de datos públicas para encontrar nombres, direcciones, números de teléfono e incluso familiares. Esa información luego se envía a una aplicación en el teléfono desarrollada por Nguyen y Caine Ardayfio, el otro estudiante.

En la demostración, se puede ver a ambos usando las gafas para identificar a varios compañeros de clase, sus direcciones y los nombres de sus familiares en tiempo real. En otra parte del vídeo, Nguyen y Ardayfio conversan en el transporte público con desconocidos a los que fingen conocer basándose en la información personal, pero pública, de ellos a la que acceden.

Hace tiempo que la tecnología de reconocimiento facial es muy precisa y I-XRAY lo que hace es aprovechar un conjunto de tecnologías existentes. Se basa en parte en PimEyes, que The New York Times describió en 2022 como un motor de búsqueda facial ‘alarmantemente preciso’ que ‘cualquiera puede usar’. Lo nuevo en la demostración de Nguyen y Ardayfio es cómo esta tecnología se combina con un gadget de consumo que puede usarse de forma discreta y es fácil de acceder.

‘El propósito de construir esta herramienta no es para mal uso, y no la estamos lanzando’, escriben Nguyen y Ardafiyo en la publicación en la que explican el proyecto. Los estudiantes señalan que su objetivo es crear conciencia de que todo esto no es un futuro distópico; ya es posible con la tecnología existente. En particular, señalan que I-XRAY es único porque los grandes modelos de lenguaje detrás de las inteligencias artificiales permiten que funcione automáticamente, estableciendo relaciones entre nombres y fotos a partir de diversas fuentes de datos.

El reconocimiento facial en España

¿Podría usarse esta tecnología en España? Sería ilegal, dado que el Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial no permite el uso de sistemas de identificación biométrica en tiempo real en espacios públicos. Pero esto no quiere decir que el reconocimiento facial no se use en España.

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado emplean desde el verano de 2023 el programa ABIS, siglas en inglés de sistema automático de identificación biométrica. ABIS utiliza inteligencia artificial para determinar rostros en una imagen y relacionarlos con las personas de las que se tienen registros, y se ha empleado desde entonces en más de 400 investigaciones policiales, según recoge El País. Al no tratarse de un sistema que procese las imágenes en tiempo real, escapa a la prohibición del Reglamento Europeo de Inteligencia Artificial.