Estreno

Un “Elefante” sutil y contundente

Con motivo del Día del Orgullo, Cosmo produjo un acertado corto que huye de los estereotipos y nos presenta un “Elefante” real, cotidiano, cercano y directo

Javier Pereira en "Elefante"
Javier Pereira en "Elefante"Cosmo

No podía ser otro día, justo instantes después de que en la plaza de Pedro Zerolo se pronunciara el pregón que marcaba el pistoletazo de salida de las Fiestas del Orgullo 2023, Cosmo estrenó “Elefante”, un corto que produjo en colaboración con la ONG Apoyo Positivo con el objetivo de sensibilizar y visibilizar la discriminación laboral que sufre el colectivo LGTBIQ+ en la actualidad.

Esta producción, que puede verse bajo demanda en el canal Cosmo On, sólo necesitó alrededor de 15 minutos para mostrarnos la realidad misma, una que podemos vivir nosotros mismos en nuestro día a día, y con una sutileza pasmosa nos quita la venda de los ojos para que nos demos cuenta de cómo, cualquier persona, cualquier día, puede llegar a cometer muchos tipos de discriminación o abusos en cualquier aspecto de nuestra vida, muchas veces sin darnos cuenta.

La historia es sencilla, Mario (interpretado por Javier Pereira) es un abogado con una carrera ascendente que es fichado por una firma prestigiosa, en la que trabaja su amigo de la infancia, Jaime (Jason Fernández). El entorno conservador y exigente del despacho, no parece el mejor ambiente para reencontrarse con ese amigo que no ve hace más de dos décadas. A partir de ahí, las situaciones que se suceden son de los más real y cotidianas. Por eso, aunque las podemos ver venir, porque seguramente todos hemos estado en circunstancias parecidas, lo cierto es que “Elefante” nos ofrece una perspectiva más limpia, menos prejuiciosa, y con ello más preclara. Lo suficiente como para caer en la cuenta de nuestros propios errores y llegar a tocarnos personalmente.

Ese es el gran acierto de este corto creado y dirigido por Lasdelcine, las hermanas Cristina y María José Martín, pero también su mayor reto. “Nos preocupaba que los personajes funcionaran bien, que fueran realistas, que la gente se identificara con ellos y se sintiera tocado por las situaciones que viven. La identidad de los personajes tenía que funcionar sin la necesidad de exagerarlos para que mantuvieran su esencia. No podíamos caer en el error de disfrazar la realidad. Por eso mismo nos interesaba huir de los estereotipos, que es algo que tenemos para todo, ya no sólo para la gente que pertenece al colectivo LGTBIQ+, sino, por ejemplo, piensa en una deportista de alto nivel, entonces piensas que ya no puede ser femenina y todas estas son las cosas que hay que ir desmontando”.

Para Javier Pereira, ganador del Goya al mejor actor revelación en 2014, por su papel en “Stockholm”, y protagonista de este corto junto a Jason Fernández, lo que más le atrajo del proyecto fue “primero trabajar con Cristina y María José. Hace tiempo que nos habíamos quedado con las ganas, porque por distintas cuestiones no nos encajaban las fechas. Pero esta vez todo se dio. Después me leí el guion y me gustó mucho. Me pareció muy interesante interpretar a Mario por las dos vertientes que tiene: por un lado, como ha sido siempre, abierto, espontaneo, divertido, en definitiva, más libre; y, por otra parte, el comportamiento que desarrolla para encajar en su trabajo, para ser aceptado en un mundo tan exigente. Me resultó muy interesante ver esos cambios. Además, me apetecía mucho trabajar en algo así por la denuncia social que viene inherente a la historia”.

La clave diferencial de “Elefante” con respecto a muchos otros trabajos de denuncia es la sutileza. Cristina y María José realmente consiguieron el objetivo de evitar los disfraces y las exageraciones. Algo con lo que concuerda Javier, quien considera que es “lo más bonito del corto. Es una denuncia contundente pero delicada, no necesita ser agresiva ni exaltada, porque refleja perfectamente lo que sigue pasando, no es una historia inventada, es un guion muy natural y una situación muy real, y desde la actuación queríamos reforzar eso. Tengo la certeza de que es ahí, en los detalles más sutiles en donde todavía, muchas veces, no somos conscientes o no nos damos cuenta del daño que hacemos con comportamientos que nos consideramos normales. Al final, ves una trama en la que da igual si el personaje es homosexual o heterosexual, pues habla de la exclusión de una persona por lo que hace en su casa y es ahí donde cortan su libertad. Me satisface aportar un granito de arena en un trabajo que, creo, sirve para despertar conciencias”.

Pero “Elefante” no sólo va de discriminación laboral, Cristina y María José Martín, se las ingeniaron para introducir historias secundarias que ponen el foco en el machismo laboral o el bullyng, lacras con las que, lamentablemente, convivimos todos los días.

Un cortometraje, el mejor vehículo para transmitir el mensaje

Otro de los aciertos de Cristina y María José Martín ha sido la elección del formato, pues un corto centra el tiro y el mensaje llega directo. “La historia te lo pide, hay algunas que necesitan más desarrollo y otras como esta en la que tienes que ir al grano para tener mayor impacto. Hay detalles que son importantes y que en un largometraje se diluyen. Al espectador también le obliga a estar muy atento, porque todo lo que va pasando tiene un porqué y te lleva a algo. De esta manera también”.