Tragedia

Padre víctima de un "kamikaze" exige justicia: "Mató a mi hija hace siete años y no ha entrado en prisión"

Los padres exigen a la justicia que no lo consideren un simple accidente, sino un homicidio y sea condenado con la máxima condena

Padre víctima de un "kamikaze" exige justicia: "Mató a mi hija hace siete años y no ha entrado en prisión"
Padre víctima de un "kamikaze" exige justicia: "Mató a mi hija hace siete años y no ha entrado en prisión"Antena 3

"Kamikaze" proviene del japonés y su palabra se divide en dos según la información recogida por la RAE, Kami (divinidad) y Kaze (viento). Eran pilotos de la II Guerra Mundial del país nipón que se suicidaban al estrellarse con el enemigo con un avión cargado de explosivos. En la tercera acepción aparece como sinónimo suicida, es decir, persona que realiza una acción temeraria con propósito suicida o con riesgo de su vida, por ejemplo en la carretera conduciendo a una velocidad elevada en dirección contraria. Los "kamikazes" fueron un problema en nuestro país décadas atrás aunque por desgracia hay casos recientes sobre estas prácticas. Una de las últimas fue analizada en "Espejo Público", el magacín matinal de Antena 3 que contó con la presencia de los padres de Meritxell, una joven de 17 años que fue asesinada en la carretera C17 hace ya más de 7 años y el conductor aún no ha entrado en prisión.

Piden la máxima condena

Han pasado siete años desde el trágico accidente en la C-17, donde Meritxell, una joven de 17 años, perdió la vida debido a la conducción temeraria de Marc T., quien ayer se sentó en el banquillo de los acusados. El 5 de marzo, el conductor circuló 12 kilómetros en sentido contrario a 150 km/h, desoyendo las señales de los Mossos d'Esquadra y poniendo en peligro a varios conductores. Finalmente, colisionó frontalmente contra un Jaguar XE en Gurb (Barcelona), causando la muerte inmediata de Meritxell y dejando a los otros tres ocupantes heridos. Marc T. dio positivo en alcohol y cocaína en el momento del accidente. "Lejos de detenerse, continuó conduciendo a gran velocidad", señala el fiscal en su escrito. Durante la primera sesión del juicio, Alfons, el padre de la víctima y conductor del Jaguar, describió el impacto: "Vi un coche que me golpeaba, un impacto tremendo". Alfons relató el dolor de perder a su hija, quien aspiraba a ser abogada. La prima y la amiga de Meritxell, también presentes en el vehículo, declararon no recordar el choque. Un testigo, Carles, intentó detener al kamikaze haciéndole señales y lanzándole objetos sin éxito. La fiscalía solicita 13 años de prisión, 350.000 euros en indemnizaciones, y la retirada del carnet durante nueve años. La familia pide 19 años de cárcel, exigiendo justicia y que el siniestro no se considere un simple accidente. El acusado declarará el viernes y el juicio continuará durante la semana con más testigos y agentes de los Mossos d'Esquadra.

La incredulidad del padre ante la no entrada en prisión

Los padres de Meritxell han entrado en directo en "Espejo Público" después de la realización del primer día del juicio. Ellos han mostrado su descontento con la situación actual del conductor del vehículo, ya que de momento no lo consideran homicidio, sino accidente, lo que reduciría la condena de la máxima que pide la familia de Meritxell a 13 años que pide la fiscalía. Una situación bastante compleja que ha llamado la atención de los colaboradores del programa, que no entiende tampoco que no se considere lo que hizo el autor de los hechos como un homicidio. También, al considerarlo accidente, cuando él tomó declaración en el momento de los hechos no se pudo solicitar la prisión preventiva, por lo que no ha pisado la cárcel en todo este tiempo, convirtiéndose esta situación en otra denuncia por parte de la familia, a pesar de que el conductor no obedeció las señales de los cuerpos de seguridad.