AMI, contra la huelga de los repartidores de prensa

La distribución de prensa y revistas de la Comunidad de Madrid se ha reducido desde que, el pasado jueves, el colectivo de transportistas de la empresa DIMA del grupo Boyacá comenzase una huelga para poner en manifiesto las condiciones laborales a las que son sometidos los trabajadores y evitar así el despido de más de la mitad de la plantilla.

La Asociación de Medios de Información (AMI) ha declarado su «más contundente rechazo» al boicot realizado por los trabajadores autónomos y afirman mantener su postura más eficiente ante las «actuaciones violentas de los piquetes» que pretenden impedir, sin ninguna cobertura legal, el reparto de las publicaciones periódicas y las tareas habituales de los trabajadores, a la vez que lamenta «el grave prejuicio que genera tanto a lo que afecta al sector como a la sociedad civil». El derecho a la información de los ciudadanos de la capital también se ve afectado con la huelga, lo que AMI define como un «pilar básico de toda democracia que ha de respetarse y garantizarse en cualquier circunstancia». Asimismo, declaran que el conflicto puede perjudicar el futuro de otras muchas profesiones relacionadas con la prensa, como pueden ser los quiosqueros, periodistas, puntos de venta, editores y distribuidores, entre otros.