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Hoy hace un mes... en el lago de Bolsena

Mirad que buena experiencia. Fue aquí en Italia

Bolsena, Italia
Bolsena, ItaliaAlicia Romay

Ataviados con ropa de montaña, un grupo de amigos habían quedado en la plaza del pueblo en el Lago de Bolsena para tomar un café antes de iniciar la caminata. El sábado 7 marzo, comentaban que esto del virus seguramente se extinguiría a la misma velocidad con la que había aterrizado en nuestras vidas y aquí seguimos...confinados pero con señales del inicio del final del túnel.

Cada día que pasamos seguros en casa, es un día menos que falta para volver a disfrutar de lugares como Bolsena. Como debemos de ir preparando la lista de viajes pendientes, os invito a que miréis este pueblo de Italia, que además de estar en un entorno idílico, puede uno vivir una experiencia especial, durmiendo en una casa histórica.

Buscad en el GPS: Localidad: Bolsena. Dirección: Via Cavour.

Desde la carretera se empieza a distinguir el verde, mucho verde, y al fondo, una mancha azul enorme, allí está el lago. En la lateral que lo circunda, apetece detenerse en alguna de las puertas que custodian las casas que invitan a asomarse por la rendija, pero como somos fuertes, seguimos, absteniéndose de ese deseo que surge de forma inevitable. No paramos hasta llegar a una plaza. El letrero nos dice que no podemos entrar al centro, los ojos buscan rápidamente una “P” azul de parking, que menos mal, está allí mismo, de frente a nosotros.

Los trolleys con ruedas es el mejor invento de la tierra, en la gran mayoría de los pueblos de Italia los coches están prohibidos, así es que, acostumbrados a llegar tirando de la maleta de mano, no nos importa hacer el recorrido. Google Maps, nos indica que estamos a menos de 600 metros de la dirección en donde dormiremos. Vamos para allá sin pensarlo, pero, cuando atravesamos el arco de la entrada al centro de la ciudad, solo se ven pequeños locales de productos artesanos, alguna charcutería, una panadería y puertas que dan seguramente acceso a apartamentos particulares del barrio. Empezamos a dudar si íbamos por buen camino, los números de las casas eran cercanos a la dirección del buscábamos. Seguimos unos pasos más y confirmamos que habíamos llegado, no tenía pinta ni de B&B ni de hotel. Tocamos el timbre, alguien se acercó a abrir la puerta de hierro con cristales, entramos y nos encontramos de frente con la primera escultura de mármol, al fondo otra, al final del pasillo de la entrada, un patio interior y una capilla, subimos las escaleras, abrimos la puerta y nuestros ojos cada vez se hacían más grandes, estábamos entrando a una “casa palacio”, con una colección de arte expuesta en el hall, la de Luigi Rossini ,Il Viaggio Segreto” que fue calificado como el último gran ilustrador de las maravillas de Roma, todo esto así de golpe, sin ni siquiera imaginarlo.

En el salón principal, un atento propietario, nos contó sobre su histórica familia y de la no menos, histórica casa en la que habíamos elegido por casualidad, pasar esa última noche antes del confinamiento. Un empleado muy educado de origen filipino, recogió los trolleys y se ocupó de hacer el registro de nuestros datos. El salón de gra solera, de techos altos, tiene en uno de sus muros, una librería preciosa en la que posa en la parte alta un busto de mármol, al lado, otra escultura también de mármol con una cabeza que mira hacia lo alto, dos piezas preciosas. Objetos antiguos encima de una cómoda y desde uno de sus balcones, se puede ver parte del castillo de la ciudad. Seguimos emocionados los pasos de su propietario, que nos va contando la historia de esta casa palacio, nos explica que es una herencia de sus antepasados y que aunque él vive y trabaja en Roma, ha rehabilitado esta casa familiar que ahora comparte con los huéspedes que tienen la fortuna de dar con ella.

Visitar sin dudar.

El lago de Bolsena es uno de los entornos azules y verdes más agradables para pasar un fin de semana. Su origen es volcánico y se formó hace aproximadamente 300.000 años a consecuencia de la caída de la separación de dos cráteres de la cadena de los Montes Volsinos. Una localidad en la provincia de Viterbo muy recomendable para visitar todo el año pero aún más, cuando el tiempo es bueno.

Es el lago más grande de origen volcánico en Europa.

Con centro histórico delicioso

Comer o cenar entorno al lago es un placer, hay restaurantes, heladerías y como no, pizzerías. En Italia los establecimientos que ofrecen actividades acuáticas son bastante comunes, en Bolsena hay unos cuantos, uno de los clásicos es la Escuela de Vela Capodimonte. El restaurante preferido, en el lago, de los habitantes de Bolsena es la Trattoria del Moro , con buenas vistas y buena comida local. El centro histórico, a muy pocos pasos del lago, tiene un ambiente fantástico.

Un plan sencillo y muy agradable

Decidimos pernoctar en Bolsena una noche, estábamos por tomar el tren e irnos a Milán a ver la muestra de Canova Torvaldsen (entrad en el link, y ver mi artículo sobre la maravillosa muestra de la Gallerie d’Italia) y al concierto de la Scala, pero “algo nos dijo”, que era mejor quedarse más cerca de Roma, los rumores de la llegada del virus ya estaban en boca de todos, y no nos equivocamos. Aquel fin de semana fue el inicio del bloqueo total en Italia a causa del Coronavirus.

Salimos a dar un paseo por el centro y para picar algo, justo en la plaza de la entrada al centro, encontramos un local que por fuera no invitaba nada, era como una especie de charcutería con mesas y sillas altas. Una señora con mucho charme, trabajaba sin parar detrás del mostrador cortando pan y colocando los fiambres seleccionados en platos desechables. Una vez colocado todo, llamaba al cliente, siempre detrás de su mostrador, indicando que podía recoger su pedido. Algunos clientes que llegaban más tarde, antes de elegir una de las mesas aún libres, caminaban directamente al sitio en donde estaban dispuestos los vinos para elegir su botella, (no venden vino por copa sino por medias botellas en adelante) Cada uno toma sus copas y se abre la botella y se lo sirven como estando en casa. El concepto del local es de lo más original, la dueña contaba que por ley, ella no puede servir en las mesas porque esto es una charcutería y no tiene licencia para dar servicio de restaurante, pero esto justo, es el detalle que hace de este espacio, La Antica Norciceria Morelli, el mejor lugar del centro de Bolsena para ir a picar y pasar un buen rato. Para más inri, en un rincón del local, se escucha música de Edith Piaf y cantantes de la época. Más ad-hoc, imposible.

Santuario del Milagro Eucarístico. Basílica de Santa Cristina.

Esta Basílica es una de las paradas obligadas para quien hace el camino de la Via Francigena de regreso a Roma (La Vía Francígena, es una ruta que discurre desde el noroeste de Europa hasta el centro de Italia. Al igual que el Camino de Santiago, es una ruta de peregrinación milenaria pero esta vez, en vez de finalizar en la plaza del Obradoiro, frente a la Catedral de Santiago, lo hace en la plaza de San Pedro de la Ciudad del Vaticano).

Breve historia del Milagro Eucarístico de Bolsena

Este santuario es muy venerado y no solo por el culto a la Virgen, sino también por el milagro eucarístico acontecido en el año 1263, cuando un sacerdote teutón llegó al santuario, a quien la tradición más tarde, le dio un nombre, Peter. El sacerdote había llegado desde Praga a la Basílica de Santa Cristina, en un momento de dudas sobre su compromiso con Cristo. Después de venerar devotamente la tumba del santo, en este lugar celebró la Eucaristía. De nuevo sus dudas comenzaron a perturbar su mente y su corazón; rezó intensamente al santo para que intercediera ante Dios para darle esa fuerza. En el momento de la consagración, pronunciaba las palabras rituales, parecía visiblemente enrojecido con la abundante sangre, bañando el cabo. El sacerdote carecía de la fuerza para continuar el rito. Lleno de confusión y alegría, envolvió la ostia en el cabo y fue a la sacristía. Durante el viaje, algunas gotas de sangre también cayeron sobre el mármol del piso y de los escalones del altar. Pietro, recuperado de la consternación, fue a Orvieto en donde el papa Urbano IV se estableció temporalmente con su corte, a quien le confesó su duda pidiendo perdón y absolución. El supremo pontífice envió de inmediato a Bolsena a Giacomo, el obispo de Orvieto, acompañado, según la leyenda, por los teólogos Tommaso d’Aquino y Bonaventura da Bagnoregio, para verificar el hecho y llevarle las reliquias. En el puente de Río Chiaro, ahora Ponte del Sole, tuvo lugar la reunión entre el obispo, que regresó de Bolsena con las reliquias del milagro, y el papa que, con el clero de Orvieto, los dignatarios de su corte y una gran multitud agitando ramas olivo, lo había conocido procesionalmente. Urbano IV recibió al anfitrión y las sábanas empapadas de sangre, y él los llevó, para emoción de todos a la catedral de Orvieto de Santa María, y luego de mostrarselos a la gente, los colocó en el santuario. No se sabía hasta ese momento, nada del sacerdote teutón. Así cuentan la historia del milagro, a través de la memoria popular respaldada por una rica documentación literaria e iconográfica desde principios del siglo XIV. La más antigua es una crónica de Orvieto en la que el prodigio ya está identificado como Miraculo del Corpus Domini.

Visita a Aquapendente el Castello di Torre Alfina

El Castillo , del siglo XIII, ha sido hasta hace relativamente poco tiempo, una de las residencias históricas más bellas y fascinantes presentes en la región de Umbría-Toscana-Lacio. Varias familias nobles han sido sus propietarios. Su estado de conservación es de destacar. Fue adquirido, entre otras propiedades, por el conde Edoardo Cahen, que ostentaba el título de marqués de Torre Alfina y lo reconstruye. Su hijo terminó la obra después de la muerte de su padre . Por muchos años ha estado habitado, actualmente, ya renovado, además de museo y visita obligada en la zona.

El plan para visitar Bolsena está claro.

1. Pernocta en una casa palacio historica en el centro

2.- Paseo por el centro y tapas en la plaza

3.- Cena en una charcutería

4.- Visita a la Basílica de Santa Cristina

5.- Comida al lado del lago

6.- Ir a Aquapendente y visitar el Castello di Torre Alfina

7.- Regreso a Roma o a donde el destino nos depare.