Desescalada

El resurgir del caravaning por el miedo al Covid-19

El temor al contagio hace que estén aumentado las reservas de autocaravanas, que cuentan ya con un protocolo anti coronavirus

.
. Aseicar

Desde que el Gobierno dio luz verde al turismo, las reservas no han parado de crecer. Aunque no todas por igual. El miedo al Covid-19 ha hecho no solo que muchos opten por reservar casas rurales con piscina de uso privado, sino que vean en el alquiler de autocaravanas como una de las mejores opciones para poder viajar con la familia o con amigos con seguridad. El perfil de usuarios de este tipo de turismo es muy variado. Y este año si cabe más.

«A día de hoy ya se puede reservar y alquilar, pero de momento solo para viajar dentro de cada provincia. Será en junio, en la fase 3, con el levantamiento de la limitación de circular entre provincias cuando más se note esta demanda. Pero poco a poco estamos recibiendo muchas reservas y probablemente nos va a ocurrir lo mismo que el año pasado, que la demanda supere la oferta que tenemos», explica José Manuel Jurado, presidente de Aseicar.

«Actualmente contamos con una flota de 5.500 vehículos de alquiler que permiten desplazar a 22.000 viajeros (cuatro por vehículo). Teniendo en cuenta que cada uno de estos vehículos se alquila una media de 120 días al año, estamos hablando de más de 2.640.000 pernoctaciones al año», precisa.

«Para garantizar la seguridad de nuestros clientes este verano tenemos un protocolo sociosanitario para todos los asociados de Aseicar y un sello Anti Covid que garantiza la perfecta higienización de nuestros vehículos desde la entrega al cliente hasta la recepción de vuelta». Entre las medidas que aplican destaca la limpieza de vehículos tanto externa como internamente mediante procedimiento de ozono/peróxido de hidrógeno, la implantación de un protocolo higiénico-sanitario específico para el personal de la empresas caravanas y autocaravanas o el control de temperatura a la entrada para trabajadores y clientes, entre otras.

«El precio medio de alquiler en temporada alta ronda los 150-190 euros» al día. De ahí que si la autocaravana tenga cuatro plazas sea interesante por economizar ocuparla bien con la familia o los amigos. Ese precio, unido al coste de la gasolina, puede en un principio echar para atrás a los no iniciados, pero hay que tener en cuenta lo que se ahorra al poder cocinar dentro y las múltiples opciones que permite al poder recorrer todo el país sin tener que quedarse en un único enclave. Esto explica por qué «unos 150.000 vehículos recorren cada verano nuestras carreteras tanto por el norte como por el sur o por todo el país. En total desplazamos a 450.000 turistas. La ruta media viene a ser de 17 días con un gasto de 150 euros diarios en gasolina, lugares de pernocta, pequeños comercios, restaurantes…». Unas cifras que nos acercan aunque todavía estemos lejos de países como Alemania, donde el número de autocaravanas en uso está en torno al medio millón. Francia e Italia le siguen muy de cerca , con más de 250.000. Hoy esa cultura continúa sumando adeptos y aunque no se puede comparar la facilidad de viajar en autocaravana por las amplias carreteras de Alaska, lo cierto es que en España si uno se prepara debidamente una ruta puede disfrutar de los lugares más recónditos de nuestro país en absoluta libertad.

Se trata de una opción a tener más que en cuenta si uno quiere disfrutar de la naturaleza con sus seres queridos. Respecto a qué modelo de caravaning elegir, la mejor opción siempre es la que se ajuste a sus necesidades. Hay notables diferencias entre los elementos de confort que puede ofrecer una autocaravana y el de una camper. Sin embargo, las hermanas pequeñas de la familia también tienen sus ventajas, como un menor consumo de combustible o que no haya que preocuparse de la altura de los techos en los aparcamientos.

«Somos una fuente de ingresos muy importante para muchas ciudades y pequeñas localidades aunque existen otras que nos ponen más trabas por el tamaño del vehículo o porque entorpecemos la circulación por el centro de sus ciudades... pero afortunadamente cada vez tenemos más ayuntamientos friendly», explica Jurado. Por cierto, que «el estacionamiento y parada está autorizado como cualquier otro vehículo. Lo ampara la DGT», recuerda. «Lo que sí prohíbe una instrucción de tráfico es, mientras se está aparcado, sacar elementos de acampada como toldos, mesas, abrir ventanas...», añade el presidente de Aseicar, que aconseja acudir a alquilar a profesiones para evitar que se te «puedan arruinar las vacaciones». Algo que nadie quiere, y menos este verano tras tantas semanas confinados y sin poder viajar.