A solo unos días de despedirse hasta el año que viene, el invierno continúa regalando paisajes espectaculares y experiencias inolvidables en la nieve. Todavía quedan oportunidades para organizar una escapada invernal antes de que la primavera comience a asomarse. Para aquellos que desean exprimir al máximo esta época del año, Airbnb ha seleccionado algunos de los mejores destinos donde poder despedir la estación como se merece. Desde senderismo en las montañas aragonesas hasta rutas en moto de nieve por el Valle de Arán, estas opciones permiten aprovechar al máximo los últimos meses de frío y nieve.

Chalé en la montaña (Alp, Cataluña)

Los amantes del esquí y el snowboard encontrarán en los Pirineos catalanes el destino perfecto. Con sus amplias pistas y una gran variedad de rutas para todos los niveles, La Molina, en la Cerdaña, se mantiene como un clásico para los más entusiastas de este deporte. Airbnb ofrece la oportunidad de alojarse en un chalé reformado de piedra y madera cerca de pistas.

Espacio único en Ordesa (Sarvisé, Aragón)

Aragón es uno de los mejores destinos para quienes buscan una forma más relajada de disfrutar del invierno. Se trata de un destino perfecto para realizar rutas con raquetas de nieve o senderismo, entre otras muchas actividades. Cerca del Parque Nacional de Ordesa y Monte Perdido, este alojamiento es el refugio ideal para desconectar después de explorar los paisajes nevados.

Casa rústica con encanto (Espinama, Cantabria)

No solo es posible disfrutar del invierno a través del deporte; la fotografía es otra afición que se puede cultivar en esta estación. Los Picos de Europa ofrecen un sinfín de rincones para capturar la belleza de esta época del año. En el pequeño pueblo cántabro de Espinama, se encuentra esta casa cerca a los pies del mejor paisaje para capturar las instantáneas más bonitas.

Acogedora casa aranesa (Garós, Valle de Arán)

La nieve no solo es sinónimo de tranquilidad, sino también de adrenalina. Baqueira Beret es el destino perfecto para realizar rutas en moto de nieve y explorar los paisajes nevados del Valle de Arán a toda velocidad. Esta casa en el pueblo aranés de Garós es el alojamiento idóneo de Airbnb para recargar energías después de la aventura.