Testimonio

«¡Oh Capitán, mi Capitán!»

Alumnos de Pineville en Kentucky se levantan contra la deportación de su profesor, el asturiano Ernesto García

"Míster García"
"Míster García"Ernesto GarcíaCortesía de Ernesto García

Al igual que un John Keating moderno (el profesor de Literatura de «El club de los poetas muertos», interpretado por un magistral Robin Williams), Ernesto García está emocionado por la respuesta que han provocado sus alumnos de español y toda la comunidad de Pineville, en el sureste de Kentucky, para evitar su deportación.

Ernesto García con algunos de sus alumnos
Ernesto García con algunos de sus alumnosChange.orgChange.org

La razón del revuelo es que Ernesto García llegó a Estados Unidos en 2012 y consiguió un visado de profesor visitante: «Me ofrecieron la extensión de dos años más en Pineville y la cosa funcionó bien. Luego el colegio inicia todo el trámite para el cambio de visado (a H-1B, lo que le permite ser empleado del Distrito Escolar Independiente de Pineville), pero la administración es implacable», explica García a LA RAZÓN, que recibió en octubre del año pasado la primera negativa. Desgraciadamente el colegio les puso, a él y a su familia, el abogado que les ayudaría, pero «sin experiencia en inmigración». En abril recibieron la segunda negativa. La situación de la pandemia tampoco ayudó al profesor García, y el error original del centro al marcar mal su especialidad, se han transformado en la sombra de la deportación para Ernesto, su mujer, Ana, y su hija Adelaida, de 19 años. Además, el profesor nos matiza que «si salgo no sé cuándo podría volver a entrar, entre 3 y 10 años», lo que dificulta la vida laboral para este gijonés de 59 años. Pero no todo está humanamente perdido. Usando un pupitre virtual, los alumnos de Pineville se han subido a Change.org al grito de «Keep García in América» como un moderno «¡Oh Capitán, mi Capitán!», con una carta que defiende que «una persona increíble que pone una sonrisa en cada rostro que encuentra» no puede ser deportado.

«Soy más de quedarme en segundo plano, cuando asumimos que teníamos que volver, los chavales iniciaron este movimiento», cuenta el profesor. Lo primero fue crear una petición en Change.org, para que «Míster García», como le llaman cariñosamente, sintiese el apoyo del alumnado y la dirección. Ahora mismo, ya han firmado más de 2.300 personas, acompañando decenas de ellas con comentarios muy positivos. Este número sobrepasa la población de Pineville (más de 1.800 habitantes), porque la iniciativa ha llegado a medios de comunicación locales e internacionales, y hasta el senador republicano Mitch McConnell está involucrado.

La familia al completo
La familia al completoErnesto GarcíaCortesía de Ernesto García

«Los rumores llegaron al vocero de por aquí, Facebook, y empezaron a preguntarme si tendrían clase conmigo el año que viene», nos indica el profesor. Y es que García, aunque reconoce que practica una enseñanza «de carácter tradicional», confiesa que pronto se dio cuenta de que sus alumnos «necesitaban algo diferente» y se implicaron en todas las iniciativas, como la enseñanza a través de juegos, y «nos lo pasamos espectacularmente». Así Ernesto se convirtió en «Míster García», y «hasta los de Elementary, a los que no les doy clase, me saludan y me dan los buenos días». Ahora, recién terminado el curso llega el momento de las vacaciones hasta principios de agosto, pero la lucha sigue para poder volver el año que viene: «Hemos venido a Lexington (la segunda ciudad más poblada de Kentucky) para hablar con un abogado especialista», nos cuenta García, que tiene planes para aprovechar los meses de verano para acercarse a España, ya que ha nacido su primer nieto, aunque de momento le han pedido que no salga del país por si se encuentra una solución.

Como mínimo, la familia, que vive desde hace dos semanas en «una montaña rusa emocional», quiere una solución para que su hija pueda quedarse y seguir estudiando en una universidad americana.

La hija de Ernesto, Adelaida, el día de su graduación
La hija de Ernesto, Adelaida, el día de su graduaciónErnesto GarcíaCortesía de Ernesto García