Inesperado

Un hombre se ve obligado a confesar la autoría de un monolito considerado prehistórico para evitar que el Ayuntamiento invierta dinero en su restauración

No es un icono prehistórico, no pertenece a la era neolítica, ni cuenta con una antigüedad de milenios: es una firma de grafitero

 Francesc Punsola y el monolito de Santa Coloma de Carvelló
Francesc Punsola y el monolito de Santa Coloma de Carvelló Francesc Punsola Francesc Punsola

No. No es un icono prehistórico, no pertenece a la era neolítica, ni cuenta con una antigüedad de milenios. Este notable descubrimiento arqueológico relacionado con la cumbre de Montpedrós tiene únicamente tres décadas de existencia y el individuo responsable de crear estas inscripciones en piedra durante los años 90 ha admitido ser el autor detrás de este monolito. El hallazgo ha impactado significativamente a la población de la localidad, ya que se creía que las tallas prehistóricas que adornaban la región tenían una antigüedad de 9.000 años.

Santa Coloma de Carvelló, una pequeña población en Barcelona con una población de 8.000 habitantes, se encuentra sorprendida por la confesión del autor de un monolito que ha llegado a ser emblemático para el área. Aunque se pensaba que este monolito tenía milenios de historia, en realidad solo ha transcurrido un lapso de 30 años desde su creación. El individuo detrás de esta obra, Francesc Punsola, ha decidido hacer pública su autoría después de conocer los planes del Ayuntamiento de Santa Coloma de Carvelló para invertir una considerable suma en la restauración del monolito, que sufrió daños por un acto vandálico en 2020.

El autor

Francesc Punsola, quien ha permanecido en el anonimato durante tres décadas, ha compartido su identidad y ha proporcionado evidencia visual de sí mismo esculpiendo la piedra para respaldar su confesión. Ha revelado que las inscripciones en realidad son firmas características de un grafitero.

En la década de los 90, Punsola experimentaba con el "land art" como parte de su exploración en el campo artístico del graffiti. Explicó cómo una de las figuras en la piedra representa sus iniciales y su segundo apellido, aunque esta aseveración ha sido desmentida. Lo que previamente se consideraba como un artefacto prehistórico, resulta ser una creación de "land art". Esto esencialmente es un graffiti grabado en piedra, obra de quien bajo el seudónimo de Frank Trepax fue uno de los precursores del arte urbano en esa época.

El propio artista ha intervenido para prevenir el derroche de recursos municipales al darse cuenta de que el Ayuntamiento estaba contemplando restaurar el supuesto petroglifo. En declaraciones a TV3, afirmó: "Que ni un solo euro de nuestro bolsillo se gaste para hacer esa tontería". El Ayuntamiento de la localidad también se mostró perplejo por el hecho de que la autoría del grabado se haya develado después de tantos años, aunque reconocieron que ya tenían algunas sospechas. En un comunicado, explicaron que el estudio arqueológico realizado por la Generalitat después del daño sufrido en 2020 presentaba dudas sobre la asignación del grabado al megalitismo debido al tipo de incisión en la piedra.