Cargando...

Salud

Los médicos recomiendan evitar los embarazos en el primer mes tras recibir la segunda dosis de la vacuna contra la Covid-19

Una especialista del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla explica las claves para llevar una gestación segura en tiempos de pandemia

Flavia y Manuel, una pareja de Alcalá que recientemente han dado a luz a su primer hijo en el Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla, junto a Mercedes Romero, jefa de matronas del hospital La Razón

El embarazo es una de las etapas más bonitas por las que pasan las mujeres que deciden tener un hijo. Suele ser una decisión premeditada que se aborda teniendo en cuenta muchos factores como la situación laboral o la economía familiar. No obstante, ya sea porque se haya dado de forma fortuita o premeditada, la gestación es un proceso en el que los padres cuidan hasta el más mínimo detalle en todo lo que se refiere al cuidado de la madre, la alimentación o las visitas al médico.

Sin embargo, la irrupción de la Covid-19 también ha afectado a la vida de las mujeres embarazadas y sus parejas. No todo es como antes, pero cientos de niños siguen naciendo cada día en España sin ningún problema derivado del coronavirus. Si ante una situación normal las dudas e inquietudes que genera un embarazo son muchísimas, en el momento actual, en el que el país está atravesando la tercera ola de una pandemia mundial, es lógico que aumenten. Para salir de dudas sobre todas las cuestiones importantes relativas al embarazo, parto y postparto en tiempos de pandemia, la ginecóloga María de los Ángeles Calvo, del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla, explica en este artículo qué impacto puede tener la Covid-19 en esta etapa tan importante en la vida de miles de mujeres.

Doctora María de los Ángeles CalvoLa RazónLa Razón

En lo que se refiere a las visitas a la consulta, la doctora asegura que no ha cambiado nada porque “las embarazadas necesitan hacerse ecografías y una atención presencial para conocer el estado del bebé que no se puede abordar de forma telemática”. En cambio, explica que ya solo pueden acceder a las consultas de forma individual, “sin acompañantes”, algo que lamenta porque en algunas ocasiones “se tienen que enfrentar solas” a diagnósticos complicados.

Por otro lado, los primeros estudios –a raíz de la crisis sanitaria que comenzó en España en marzo de 2020– apuntaban a que las mujeres embarazadas no suponían una población de riesgo que pudieran tener complicaciones derivadas del coronavirus. No obstante, Calvo señala que “después sí se ha visto que son un grupo de riesgo porque este estado produce cambios fisiológicos que pueden predisponer a la embarazada –sobre todo en el tercer trimestre y si sufren patologías previas como hipertensiones crónicas, diabetes, edad avanzada u obesidad– a formas graves de la infección”. Los datos no son alarmantes. Según explica la doctora, el grupo más frecuente en el que se ha observado que el coronavirus puede crear una infección grave es aquel en el que las embarazadas tienen alguna patología de base y en el tercer trimestre. “Como norma general, el 80 por ciento de las embarazadas que se contagian van a sufrir formas leves o asintomáticas del coronavirus y solo un porcentaje del cinco por ciento aproximadamente sufrirá consecuencias más graves”, afirma.

Entre los síntomas que puede sentir una mujer en gestación relacionados con el coronavirus se encuentran la fiebre, la tos seca o el dolor de garganta. Además, con los estudios que hay hasta la fecha, el coronavirus en el embarazo no produce ni mayor tasa de abortos precoces, ni mayor tasa de defectos congénitos. En cambio, si existe un aumento del 15-17 por ciento de la prematuridad iatrogénica.

Respecto al día del parto, enfrentar este momento con mascarilla es complicado, pero si se es positivo en coronavirus mucho más. La enfermedad por coronavirus es “trombótica”, una cuestión que, junto a que “el embarazo incrementa la hipercoagulabilidad de la sangre”, se potenciará y la mujer tendrá mas probabilidad de padecer eventos trombóticos. En este contexto, Calvo explica que “toda embarazada que sea positivo en coronavirus necesita una heparina en dosis profilácticas durante 14 días en las formas leves” desde que se detecta que está contagiada.

Los expertos recomiendan tomar todas las precauciones posibles que estén al alcance de la mujer embarazada en tiempos de pandemia. Por su parte, la ginecóloga insiste en la limitación de las visitas y el aislamiento en casa, no salir a comer con nadie, hacer ejercicio físico moderado, una dieta sana y equilibrada, usar mascarilla y mantener una excelente higiene de manos.

Hasta este momento, con los estudios actuales, en lo que se refiere a la transmisión vertical –cuando la madre pasa la enfermedad al bebé a través de la placenta– solo se ha constatado que ocurra en un uno por ciento de los casos. Según explica la doctora del Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón, “la mayoría de las veces los niños se contagian como el resto de la población: con microgotas que se pueden transmitir cuando la madre le está dando el pecho y no tiene higiene de manos o la mascarilla puesta”.

En lo que se refiere a la lactancia, parece ser, según los últimos datos, que por la leche materna no se puede transmitir el coronavirus. De hecho, todas las organizaciones médicas –y la OMS– aconsejan la “lactancia materna exclusiva durante seis meses” a los recién nacidos, incluidos los de las madres contagiadas “porque es una alimentación que les va a pasar toda la inmunidad necesaria y un complejo alimenticio del que no se tiene duda”, sentencia Calvo.

Respecto a las vacunas que se están comenzando a administrar desde principios de año para inmunizar a la población, la doctora explica que las embarazas actualmente no están dentro de la estrategia de vacunación y que existe limitada experiencia en el uso de la misma mujeres embarazas”. Para la lactancia tampoco está contraindicada y lo que sí se recomienda a las mujeres en general es que “hasta el mes siguiente de vacunarse de la segunda dosis no se queden embarazadas”.

Por último, el parto es algo espontáneo que no se sabe en qué momento puede ocurrir. La estrategia que se sigue actualmente en los centros hospitalarios, como en el Quirsónsalud Sagrado Corazón de Sevilla, es diferente dependiendo de las circunstancias de cada mujer. En caso de que la paciente llegue de parto,“se le hace un test de antígenos para tener los resultados al instaste”. Por el contrario, si fuera programado, “se le realiza una prueba pcr 48 horas antes del día del ingreso”. Por otra parte, aquellas que han tenido la Covid-19 en los últimos tres meses no se les realiza ningún test porque se les consideran inmunes. Además, en el Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón, la persona que acompaña a la mujer durante el parto tiene que someterse a un test de antígenos para descartar que pueda estar contagiado.

En definitiva, gracias a los estrictos protocolos de seguridad que se siguen en centros sanitarios como el Hospital Quirónsalud Sagrado Corazón de Sevilla, las madres pueden estar tranquilas en un día tan especial. Quirónsalud cuenta con la acreditación APP+, que certifica que sigue unos protocolos seguros frente a la Covid-19 tanto para pacientes como para los profesionales.