El Tribunal Supremo (TS) ha confirmado la condena a 36 años y 4 meses de prisión impuesta a A.M.R., considerado autor material del homicidio de un hombre y de las heridas graves sufridas por sus dos hermanos durante un intento de robo cometido en un invernadero de cáñamo industrial en Almería capital en septiembre de 2020.

La Sala de lo Penal ha desestimado íntegramente el recurso de casación presentado por la defensa del acusado y ha avalado el fallo dictado por la Audiencia Provincial de Almería, que hizo suyo el veredicto de culpabilidad emitido por un jurado popular.

Los hechos ocurrieron sobre las 19:00 horas del 30 de septiembre de 2020 en el paraje Cintas del Cortijo Vidal, cuando varios acusados accedieron a un invernadero “para sustraer lo que creían era marihuana, pero en realidad era cáñamo industrial”. Dos de ellos se quedaron en el coche y el resto rompieron una de las bandas del invernadero para acceder al interior.

Según el tribunal, A.M.R., que portaba una pistola del calibre 22 milímetros sin conocimiento del resto del grupo, se subió al muro de una balsa de riego y disparó contra tres hombres que se encontraban dentro de la instalación. Uno de ellos murió en el acto por destrucción de centros vitales, otro sufrió una herida abdominal grave y el tercero resultó herido en una pierna con fractura abierta de fémur.

Los asaltantes huyeron sin lograr su objetivo al llegar en ese momento otras personas en el lugar.

Durante el asalto, A.M.R. y al menos otros dos procesados llevaban pasamontañas y mascarilla para evitar ser identificados, pero el Supremo destaca que uno de los heridos reconoció sin dudas al autor de los disparos durante el juicio, lo que refuerza la solidez de la condena.

El condenado deberá cumplir al menos la mitad de la pena antes de poder acceder al tercer grado penitenciario y ha sido condenado también a indemnizar a las víctimas y a la madre del fallecido con un total de 254.465 euros.

Además de 14 años de prisión por un delito de homicidio, se le imponen dos penas de 9 años por sendos delitos de homicidio en grado de tentativa, 3 años por tentativa de robo con violencia y 1 año y 4 meses por tenencia ilícita de armas, todos ellos con la agravante de disfraz, salvo este último.

El Alto Tribunal también ha ratificado las penas impuestas a J.D.G., B.R.B., A.G.M., V.L.G., C.V.G., J.D.P. y A.S.C. por tentativa de robo con fuerza, con penas que oscilan entre los 6 y los 10 meses de prisión, algunas con la agravante de disfraz o la atenuante de confesión.

Dos de los enjuiciados, A.M.C. y C.L.C., fueron absueltos al ser considerados no participantes en los hechos.