Andalucía pierde 1.522 millones al año por el modelo de financiación actual

La Ley 22/2009, de 18 de diciembre, por la que se regula el sistema de financiación de las Comunidades Autónomas de régimen común y Ciudades con Estatuto de Autonomía y se modifican determinadas normas tributarias es un texto complejo que la mayoría de los especialistas coinciden en señalar que tiene una dificultad de interpretación. Por ejemplo, el artículo 8 desarrolla la capacidad tributaria en el año base como el conjunto de los recursos tributarios que corresponden a cada Comunidad Autónoma y presenta distintas fórmulas para calcularlo que han sido siempre objeto de controversia. En cualquier caso, y más allá de las dificultades técnicas, sí existe un consenso unánime después de 16 años –comenzó a regir el 1 de enero de 2009– y es que Andalucía es una de las comunidades más perjudicadas por su aplicación, perdiendo más de 1.000 millones de euros al año con respecto a la media de las comunidades autónomas. Y lo peor es que esa diferencia se agrava con el paso de los años y en función del ciclo económico y la recaudación anual registrada.

Así, la consejera de Economía, Hacienda y Fondos Europeos y portavoz del Gobierno andaluz, Carolina España, aseguró ayer sobre el informe que publicó este lunes la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) acerca de la liquidación de 2022 del sistema de financiación de las comunidades autónomas de régimen común «demuestra dos cosas: que la brecha entre las comunidades mejor financiadas y las peor financiadas, entre las que se encuentra Andalucía, es cada vez mayor».

La realidad es que tras el análisis de Fedea de la liquidación de 2022 se infiere que Andalucía es la comunidad con mayor déficit de financiación en términos absolutos al recibir en 2022 1.522,74 millones de euros menos de lo que recibieron de media las comunidades autónomas.

«Son 114 millones de euros más de los que dejamos de recibir en 2021. Cada año, la brecha con las comunidades que reciben más financiación, aumenta. Es insostenible», indicó España.

El informe de Fedea vuelve a señalar a Murcia, Valencia, Andalucía y Castilla-La Mancha como las cuatro comunidades peor financiadas en términos de financiación por habitante ajustado, y, en consecuencia, reciben una financiación por debajo de la media.

Por ese motivo, «no se puede demorar más la puesta en marcha de un fondo transitorio de nivelación para las comunidades que recibimos una financiación por debajo de la media».

«El Gobierno de Pedro Sánchez no tiene ninguna sensibilidad hacia territorios en los que vive el 38% de la población española. Sólo piensa en diseñar una financiación privilegiada para Cataluña, pero ni siquiera lo hace porque crea que la necesita, sino porque necesita el apoyo de las formaciones independentistas para mantenerse en el poder», sostuvo.

La nueva portavoz del Ejecutivo se preguntó, sobre las conclusiones del trabajo de Fedea de que Andalucía recibió 183 euros menos por habitante ajustado que la media, y 214 euros menos que Cataluña en 2022, «por qué los andaluces, año tras año, reciben menos financiación que la mayor parte de los españoles», cuestión a la que añadió «por qué el Gobierno trata a los andaluces como si fueran menos españoles que, por ejemplo, los catalanes, para los que todo parece poco».

Con los datos de la liquidación de 2022, entiende que el Gobierno no puede seguir demorando crear un fondo transitorio de nivelación, que permitiera a las cuatro comunidades financiadas por debajo de la media equipararse con el resto en recursos mientras se acomete la reforma del actual modelo de financiación autonómica.

«Este fondo tendría que tener una dotación de 3.719,7 millones de euros, de los que Andalucía debería recibir 1.522,7 millones, que es lo que nos faltó en 2022 para llegar a la media de financiación», argumentó.