Caminamos hacia la sinodalidad

¡Qué hermosa! La palabra sinodalidad, caminamos juntos como pueblo de Dios.

Una nueva cuaresma, un nuevo tiempo de renovación y reflexión, que nos brinda la vida para los católicos para vivir con Fe la Pasión Muerte y Resurrección de nuestro Señor.

Tan importante es para nuestras Hermandades que durante esa semana, nos convertimos

en Cofradías y damos público testimonio de nuestra Fe. Y son nuestras estaciones de penitencia muestra de ello.

Ya con una normalidad presente, pero sin olvidar la crueldad de una guerra sin sentido y la desigualdad de un mundo que no espera a nadie. Las Hermandades de Almería han sabido adaptarse a tiempos pasados y como ¡no! Vivimos un presente lleno de ilusión. Así que con esa Ilusión trabajan durante este tiempo para vivir una auténtica sinodalidad.

Volveremos a poner en alerta nuestros cuatro sentidos. El olor del incienso, del carbón quemado, del pabilo de la cera que prende iluminando. El oído del «rachear» de nuestros pasos por una renovada carrera oficial, o esa marcha que nos emociona.

La vista que se ilumina con nuestros titulares y nos conmueve el corazón.

El gusto de una gastronomía que también se disfruta, como una leche frita, unos roscos o unos huesos de santo. Pero nada tiene sentido si no cultivamos la Fe. Si no nos identificamos como pueblo de Dios. Si las hermandades no evangelizamos no avanzaremos y nos quedará la superficialidad de que se convierta en una afición, un capricho, un hobby, una moda. Por ese motivo es tan importante cultivar la Fe.