Transición Ecológica

Moeve, sesenta años en Andalucía impulsando la innovación

Con una producción de 16.700 millones de euros, su actividad supone el 9,2% del PIB regional

Con una producción valorada en más de 16.700 millones de euros y cerca de 3.000 empleos directos, Moeve –antes Cepsa– es hoy la primera empresa de Andalucía por volumen industrial. Su actividad supone el 9,2% del PIB regional y genera más de 6.600 puestos de trabajo si se cuentan los indirectos e inducidos. Sesenta años después de su implantación en la región, la compañía celebra su aniversario con una nueva identidad y con el objetivo de liderar la transformación energética desde el sur de Europa.

«En seis décadas, el Parque Energético San Roque (PESR) ha pasado de ser una instalación clásica a convertirse en un referente de innovación, digitalización y sostenibilidad», explica Rosendo Rivero, su director. Una evolución que, añade, ha sido posible gracias a «la visión de la compañía y a la implicación de las personas que forman Moeve». Su afirmación encaja con la estrategia «Positive Motion 2030», con la que la empresa prevé que el 60% de su resultado operativo proceda de negocios sostenibles antes de que acabe esta década.

Una historia que comenzó en Cádiz y Huelva

En 1965, Moeve inició su andadura en Andalucía con dos proyectos que marcaron un punto de partida decisivo. Ese año se aprobó la instalación de la refinería Gibraltar-San Roque en tierras gaditanas, mientras que en Palos de la Frontera (Huelva) comenzó a levantarse la planta de La Rábida, cuya primera chimenea –conocida como la palmera– se convirtió en su emblema más reconocible.

En este recorrido, hay imágenes que se han quedado para la memoria. En 1976, los entonces Reyes de España, Don Juan Carlos y Doña Sofía, visitaron las instalaciones onubenses para inaugurar la planta de lubricantes del Parque Energético La Rábida, símbolo de un país que modernizaba su industria. Poco después, en 1979, la creación de la Unidad de Informática de La Rábida marcaría el inicio de una nueva etapa tecnológica en la gestión energética.

En la actualidad, la hoja de ruta de Moeve sitúa a Andalucía como epicentro de su actividad. El Valle Andaluz del Hidrógeno Verde, con centros en Huelva y Cádiz, es el mayor proyecto de este tipo presentado en Europa hasta la fecha. Con una capacidad combinada de electrólisis de 2 GW y hasta 300.000 toneladas anuales de producción, evitará seis millones de toneladas de CO2 cada año y generará unos 10.000 empleos en su construcción. Al respecto, Rivero sostiene que «Andalucía tiene una oportunidad única para liderar la transición energética», una idea que enlaza con la apuesta por crear un ecosistema industrial basado en la colaboración con empresas como EDP, Enagás Renovable o Fertiberia.

Una mirada a largo plazo

En Palos de la Frontera, Moeve construye la primera planta de alcohol isopropílico (IPA) de España, un producto base de los geles desinfectantes y de la industria farmacéutica. Con 75 millones de inversión y una capacidad de 80.000 toneladas anuales, refuerza la autonomía productiva del país. «Seis décadas marcadas por la robustez, la pasión y el compromiso de nuestra gente», resume Esther González, directora de Moeve Química Palos de la Frontera. «Este legado nos impulsa a mirar al exterior y navegar en mercados llenos de incertidumbre», añade, convencida de que «hemos aprendido a evolucionar con valentía».

Así, el futuro también pasa por los biocombustibles de segunda generación. En el Parque Energético La Rábida (Huelva), Moeve construye junto a Bio-Oils una planta de 1.200 millones de euros que producirá medio millón de toneladas de diésel renovable y combustible sostenible para la aviación (SAF). Según la compañía, la planta total evitará tres millones de toneladas de emisiones de CO2 al año, el equivalente al 4% del transporte por carretera en España.

Por otro lado, en 2023, la compañía lideró el impulso de un corredor verde entre España y Países Bajos (Algeciras-Róterdam) destinado a transportar hidrógeno renovable hacia el norte de Europa. «La innovación es el acelerador de la transformación de Moeve hacia la transición energética», indica Belén Linares, directora de Innovación, que asegura que en Moeve apuestan «por tecnologías clean tech, deep science y deep tech, que después escalamos en nuestros parques energéticos para avanzar hacia la descarbonización».

Además de la transformación industrial, Moeve fue en 2025 la primera gran empresa de Andalucía en adherirse al Pacto Andaluz por la Conciliación y la Corresponsabilidad. «Creemos que las personas son el motor de cada transformación», afirma Bettina Karsch, directora global de Personas, Organización y Cultura, que entiende que «celebrar 60 años es reconocer el talento que nos ha traído hasta aquí». Ese compromiso se traduce en cifras: un 39,2% de mujeres en plantilla y un 31,5% en posiciones de liderazgo.

La compañía ha sido también la primera del sector energético español en obtener la certificación ISO 30415 de Diversidad e Inclusión. «El Parque Energético San Roque ha vivido una evolución tecnológica sin precedentes», explica la ingeniera Palma Selva, distinguida como Mujer Líder en Andalucía 2025. Para ella, «en un sector tradicionalmente masculino», las mujeres «lideran hoy proyectos clave», un cambio, asegura Selva, en el que «la diversidad se ha convertido en motor de innovación y desarrollo para toda la región».

Asimismo, desde la Fundación Moeve, la compañía impulsa proyectos como el Campus de la Energía o la restauración de la Laguna Primera de Palos, pionera en España, además de la Estación Ambiental Madrevieja, ejemplo de conservación en el Campo de Gibraltar. Moeve ha dejado atrás la imagen de refinería tradicional para convertirse en símbolo de una nueva energía. Como resume Rivero, «hoy somos parte activa del cambio», un objetivo que llevan a cabo «comprometidos con el territorio que nos acoge».