Entrevista

Natalia Sánchez: «El déficit de vivienda en Málaga es un desafío»

Pese a la guerra de Ucrania y la inflación, el tejido empresarial malagueño «tiene voluntad y ganas de crecer»

Natalia Sánchez
Natalia SánchezLa Razón

¿Cuáles son los retos que tiene a día de hoy la provincia de Málaga en clave económica?

Grosso modo, el de apuntalar la recuperación económica y seguir generando oportunidades para que el año 2024 sea un año mejor, si cabe. Hay grandes desafíos que requieren de soluciones, como el déficit de vivienda y la carestía de precios.

El hecho de que se celebren elecciones generales el próximo 23 de julio, ¿en qué medida afecta al contexto económico?

Es cierto que las elecciones tenían que convocarse este año, y ha sido voluntad del presidente del Gobierno convocarlas de manera adelantada. Como tiene potestad para hacerlo, respetamos esa decisión, si bien es atípica la fecha elegida. No obstante, desde la perspectiva empresarial, animamos a la ciudadanía a que acuda a votar pese a celebrarse en un mes complejo. Es importante que todos participemos, porque así seremos partícipes del futuro que creemos construir. A nivel económico, sigue primando la incertidumbre ante amenazas como la guerra de Ucrania o a nivel doméstico la inflación, pero afortunadamente hay voluntad y ganas de crecer, y resiliencia por parte del tejido empresarial.

¿En qué se fundamenta esa esperanza?

Somos conscientes de que va a haber una ralentización del crecimiento este año 2023 que ya se está notando en aspectos como la contención de la inversión o la reducción del consumo que arrastramos desde el último trimestre del pasado ejercicio. Con todo, insisto en la voluntad de seguir creando y generando actividad por parte del tejido empresarial, si bien hay que ir viendo día a día cómo evolucionan las muchas variables que se conjugan en esta dirección.

¿Qué comportamiento va a tener en los próximos meses la inflación?

A día de hoy, sigue siendo alta, y pronto habrá una nueva subida de tipos de interés por intentar contenerla.

Málaga será la provincia andaluza, según las estimaciones de Unicaja Banco, donde más crecerá la economía, por encima del dos por ciento, ¿seguirá siendo el turismo el motor de ese aumento?

Las expectativas en torno a la actividad turística son muy positivas para este año, a tenor de los datos conocidos como el hecho de que el aeropuerto malagueño haya puesto a la venta cuatro millones de billetes o que la planta hotelera hable ya de una ocupación del ochenta por ciento. No obstante, no hay que olvidar que no sólo las cifras son relevantes, la cantidad, sino que se ha de trabajar por garantizar la rentabilidad del sector.

¿Qué otros sectores arrojarán comportamientos positivos?

Sin duda, las nuevas tecnologías representan a día de hoy una industria relevante que trabaja mucho desde Málaga con mercados exteriores, al igual que el mercado agroalimentario sobre el que no obstante pesan importantes amenazas como la sequía. Es necesario que se optimicen recursos para garantizar que los cultivos no se resientan ante esa difícil situación hídrica. Es de igual modo reseñable el sector logístico, con empresas referentes en el panorama, con una incidencia clara en el mercado laboral.

Sin embargo, la tasa de paro sigue siendo muy elevada…

Estamos alcanzando cifras altas de empleo y cotización a la Seguridad Social y existe una clara voluntad por parte de las empresas de seguir creando empleo. Es cierto que sigue existiendo cierta estacionalidad, aunque en la actualidad el 50 por ciento son contratos indefinidos. Eso sí, en muchos casos fijos discontinuos que pueden emerger ahora en temporada estival. La cuestión es que, si las empresas crecen, se mantendrá y generará empleo, por eso cuando hablamos de elecciones, lo que intentamos trasladar es que si queremos progreso económico y social ha de ir de la mano de políticas que faciliten y promuevan el trabajo de las empresas.

¿Qué demandas plantea el sector empresarial a la Administración pública en el contexto electoral?

Es importantísimo agilizar la normativa que regula la actividad empresarial, toda vez que ésta es importantísima para dinamizar cualquier actividad económica. En ese campo han de ir nuestras demandas. En el caso de los autónomos, hay que reconocer que han experimentado un crecimiento importantísimo, desde antes incluso de la pandemia, y hay que defenderlos. Se ha avanzado en materia de cotizaciones, fomentando que haya un tiempo de decalaje en la puesta en marcha de la actividad, pero hay que seguir avanzando en adoptar herramientas que les permitan abrirse mejor al mercado.

¿Qué soluciones cree necesarias para atajar la falta de viviendas y el elevado precio que tienen a día del hoy el sector inmobiliario?

El crecimiento acarrea determinados inconvenientes, a lo que se une la proliferación de viviendas turísticas. Los problemas de falta de una determinada tipología de vivienda hace que se encarezcan los precios y eso ha ocurrido en Málaga porque ha habido y hay una importante demanda por parte de personas que, o bien quieren tener aquí una segunda residencia o bien vienen a vivir por trabajo.