Los detalles

El nuevo Plan de Ordenación del Territorio asumirá las exigencias de la Agenda 2030

El trabajo deberá dar pautas para crear «ciudades inclusivas» bajo el principio de «no dejar a nadie atrás»

Imagen que muestra los 17 objetivos de la Agenda 2030
Imagen que muestra los 17 objetivos de la Agenda 2030la razonLa Razón

El actual Plan de Ordenación Territorial Urbana de Andalucía no ha tenido el impacto positivo previsto en el mapa urbano de la comunidad. De ahí que la elaboración de uno nuevo –el actual es de 2006– se ha convertido como uno de los objetivos prioritarios de esta legislatura. Al margen de facilitar el desarrollo económico de los municipios, el nuevo POTA tiene también unos objetivos de carácter político, como es adaptar la realidad de las ciudades a la Agenda 2030.

En septiembre de 2015 todos los Estados miembros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible, un plan de acción a favor de las personas y el planeta en el cual se engloban los 17 objetivos de Desarrollo Sostenible. Esos objetivos son los siguientes: fin de la pobreza; hambre cero; salud y bienestar; educación de calidad; igualdad de género; agua limpia y saneamiento; energía asequible y no contaminante; trabajo decente y crecimiento económico; industria, innovación e infraestructura; reducción de las desigualdades; ciudades y comunidades sostenibles; producción y consumo responsables; acción por el clima; vida submarina; vida de ecosistemas terrestres; paz, justicia e instituciones sólidas; y alianzas para lograr los objetivos.

Una de las cuestiones que tendrá que tener en cuenta la consultoría que ha recibido el encargo de la Consejería de Fomento para elaborar el nuevo POTA es que «transcurridos casi 15 años desde su aprobación, se han ido sucediendo condicionantes, algunos de gran trascendencia, como las nuevas iniciativas y referentes en el ámbito internacional, europeo y nacional que inciden en la operatividad del plan vigente y aconsejan su revisión. Entre ellas, destaca por su importancia la Agenda 2030 de Naciones Unidas, adoptada por Resolución de septiembre de 2015, con sus 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y sus 169 metas, donde se tienen en consideración aspectos tanto económicos y sociales, como ambientales».

En concreto, entre los 17 objetivos citados, hay uno específico –el número 11 en concreto– para la creación de «ciudades y comunidades sostenibles». Por ello, la redacción del POTA deberá tener como objetivo «la creación de ciudades inclusivas», así como la creación de «un vínculo de refuerzo recíproco entre urbanización y desarrollo y configurar asentamientos humanos fundamentados en la equidad, la justicia y la paz, bajo el principio global de no dejar a nadie atrás».

Otro de los aspectos que será «referente fundamental» en la configuración del Plan de Ordenación Territorial serán «las determinaciones emanadas de las cumbres anuales celebradas sobre cambio climático en el seno de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático». Igualmente, el POTA deberá dar respuesta a los retos energéticos, «avanzando en la sostenibilidad ambiental y territorial especialmente con las fuentes de energías renovables» y al «desafío demográfico, con especial atención a las necesidades de las áreas con mayores problemas y tendencias de despoblación o envejecimiento».

Esta identificación del nuevo POTA con la Agenda 2030 puede abrir una vía de discrepancia con VOX, partido que reniega públicamente de este proyecto con el que sí están de acuerdo el resto de formaciones políticas. De hecho, en la lona electoral de cara a las elecciones del próximo 23 de julio, la Agenda 2030 es uno de los hitos que «tira a la basura». También ha mostrado su oposición en el Parlamento de Andalucía.