El Ayuntamiento de Sevilla informa al juez de que no hay “riesgo inminente” de seguridad con el ficus de Triana

El Ayuntamiento de Sevilla ya ha informado “pormenorizadamente” al Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 9 de “todos los pasos seguidos” por su parte desde que el juez suspendió cautelarmente la licencia de tala otorgada a los Predicadores Dominicos para la tala del ficus situado junto a la parroquia de San Jacinto, en Triana.

En el escrito de alegaciones elaborado por los servicios jurídicos de la Gerencia de Urbanismo y Medio Ambiente, estos incluyen un informe técnico realizado por una “empresa especializada” sobre las condiciones de seguridad que en la actualidad presenta el ejemplar, del que ha quedado sólo el tronco, que tiene una validez para seis meses. Esos especialistas aseguran que “no existe riesgo inminente” en los términos que recoge el propio auto judicial, como ha señalado el Ayuntamiento este martes.

En su documento de alegaciones, el Ayuntamiento explica que cumplió de modo “puntual e inmediato” el auto judicial que suspendía cautelarmente la licencia de tala y ordenaba la “adopción de las medidas” que fueran “necesarias” para “evitar daños a las personas y bienes” como consecuencia de la paralización de los trabajos de apeo. La resolución de paralización fue notificada a la parroquia a las 15.00 horas del 18 de agosto, el mismo día de la notificación del auto.

Para entonces, los trabajos para el apeo del árbol ya habían cesado, según comprobaron los técnicos municipales personados en la parroquia, y sólo se realizaban labores de retirada de ramas y troncos por parte de la empresa contratada por la Orden de los Dominicos, titular del ficus. Cuando terminó esa retirada, se precintó el espacio por parte de Urbanismo.

Al día siguiente, en cumplimiento del auto judicial, comenzaron los trabajos de preservación del árbol. En concreto, con riego “copioso” de toda la base permeable del ejemplar y puntos accesibles a sus estructuras radiculares cercanas. En la jornada siguiente se procedió a la protección de los cortes y zonas sensibles de la corteza con arpillera, a fin de protegerlos de la insolación y permitir la emisión de nuevos brotes de forma natural.

Para los próximos días se ha previsto la inclusión del ficus en el circuito de riego diario por parte de Parques y Jardines, así como la humectación de las arpilleras, y se realizarán tratamientos en las heridas que se han detectado en la estructura radicular emergida (sobre el suelo) y para la aplicación de nutrientes.

Respecto a la suspensión cautelar emitida “sin audiencia previa” por el juez, el Ayuntamiento traslada las fichas de evaluación del riesgo para los próximos seis meses elaboradas por una empresa especializada. “Desde el Área de Parques y Jardines se continuarán las actuaciones de protección del árbol siguiendo las consideraciones del auto judicial”, apostilla el Consistorio.