6 sorprendentes formas de reducir las arrugas

A todos nos preocupa cuidar nuestra piel y evitar la aparición de arrugas, sobre todo porque son, además, un signo revelador de nuestra edad. Cuanto más mayores somos, más arrugas tenemos. Pero afortunadamente, existen numerosos métodos y productos para, o retrasar su aparición o tratar de reducirlas (ojo, no desaparecer). Cremas, sueros o procedimientos quirúrgico y no quirúrgicos son algunos de los más utilizados, pero pasamos por alto otras sorprendentes formas de reducirlas que, hasta ahora, seguro desconocías. Toma buena nota.

1. Consumir soja: la genisteína, presente de forma natural en la soja, es una excelente aliada para ayudarnos en la producción de colágeno. El colágeno es la proteína que le da resistencia y elasticidad a la nuestra piel pero que, por desgracia, disminuye con la edad. La genisteína trabaja inhibiendo la acción de los enzimas que reducen y degradan la producción y calidad del colágeno en la piel.

2. Consumir pescado: pescados tan saludables como el salmón y las sardinas son una gran fuente de proteína muy necesaria para mantener y reparar la piel a nivel celular. También es una fuente de ácido graso amega-3 esencial (y de la que tanto hemos hablado). Estos ácidos grasos “engordan” nuestra piel manteniéndola joven.

3. No lavarse la cara en exceso: durante la limpieza de nuestra piel, esta se despoja de los aceites naturales necesarios para regular y mantener el equilibrio cutáneo. Lo mejor es lavarse la cara regularmente en la noche (cuando generalmente nos desmaquillamos) y por la mañana lavarla solo con agua. Importante y básico es utilizar una hidratante después.

4. Dormir boca arriba: pues sí, este sencillo consejo puede ser un gran aliado para evitar la aparición de arrugas. Cuando duermes de lado o boca abajo, nuestra cara soporta mucho peso creando líneas de sueño. Dormir así noche tras noche puede provocar arrugas en la cara del contacto con la almohada. Así que lo aconsejable es el peso lo soporte nuestra espalda, no la piel de nuestra cara.

5. Hacer ejercicio: moverse es aconsejable para todo, hasta para evitar las arrugas. El ejercicio promueve el flujo sanguíneo de la piel, que ayuda a aumentar la tasa de crecimiento de nuevas células y la producción de aceites naturales. Si hacemos ejercicio regularmente podemos aumentar la masa muscular debajo de la piel ayudando a la creación de un vínculo más fuerte entre la piel y el músculo.

6. Usar gafas de sol: ¿cuántas veces, sobre todo en verano, no llevar gafas de sol nos ha obligado a adoptar gestos en nuestra piel que no son naturales? Si estamos constantemente entrecerrando los ojos esto provocará las dichosas patas de gallo y las arrugas de la frente. Proteger nuestros ojos nos hará mantenerlos abiertos y con gesto relajado, lo que puede reducir el número de líneas finas y arrugas que se ven alrededor de los ojos.