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Emelie Forsberg: «Al correr, como en la vida, hay que hallar placer en el esfuerzo»

Su pasión, correr, se convirtió en su profesión. Esta atleta de origen sueco describe en «Correr y vivir» (geoPlaneta) cómo su afición por el «running» se ha convertido en el eje de su vida. Sus vivencias se alternan con consejos de vitales para los neófitos este deporte, pero también con aportaciones para los que se inician o ya disfrutan de los beneficios de esta práctica.

Emelie Forsberg, atleta y «skyrunner» / Foto: Miquel González/ Shooting
Emelie Forsberg, atleta y «skyrunner» / Foto: Miquel González/ Shootinglarazon

- Muchos no lo entienden, pero, ¿por qué unos se enganchan al «running» y otros no?

-Sí que es cierto que muchos empiezan en este deporte por cuestiones estéticas, para mantener la «línea» y otros por adquirir un hábito saludable, pero muchos al final se «enganchan» y empiezan a dedicar más tiempo. Supongo que el salir a correr fuera, a un parque o, si tienes la oportunidad, a una zona montañosa que te permita un mayor contacto con la Naturaleza, hace que se convierta en una actividad atractiva y agradable en la que uno se dedica tiempo a sí mismo.

-Pero, correr no siempre es algo agradable. ¿Cómo combina la diversión con el sacrificio y la disciplina que esta actividad exige?

-Hay que buscar el lado positivo y extraer lo agradable de la experiencia. Suena raro, pero se trata de encontrar placer en el esfuerzo que a veces requiere lo que estás haciendo. Esto no sólo se refiere al deporte, sino que es una filosofía que podemos aplicar en el día a día y resulta útil. Hay que disfrutar con lo que uno hace y así será más fácil llevarla a cabo.

-En el libro menciona el «flow» al correr, pero que no es fácil experimentar. ¿A qué se refiere? ¿Una sensación, un ritmo concreto?

-(Risas) La verdad es no se puede describir fácilmente. Es más como una sensación que no siempre se da cuando uno correr. Podríamos decir que se trata de esos momentos en los que uno siente que conecta a nivel sensorial con su cuerpo y con el entorno que le rodea, y por ello experimenta, pese al esfuerzo que está realizando, una sensación placentera y agradable.

-Menciona la conexión con uno mismo, al igual que promulga otra actividad muy de moda en la actualidad, el yoga. Muchos «runners» combinan ambas disciplinas. ¿Cuáles son los beneficios?

-Como comenté conectar con uno mismo, conocer mejor las exigencias y debilidades del organismo resulta básico para correr. Combinar ambas sirve para encontrarse a uno mismo y tener conciencia de cómo está el cuerpo en cada momento y cuáles son sus necesidades reales.

-Aficionados y semiprofesionales abogan por la planificación en los «entrenos». Pero en su caso, explica que ser más flexible significa adaptarse a la situación del cuerpo en cada momento. ¿Cuál es mejor?

-No se trata de dar una total libertad, porque lo que hago es planificar entrenamientos principales que no me puedo saltar y luego adaptar los que los complementan. De esta manera, escucho a mi cuerpo, tomo conciencia de mi situación y sé lo que puedo exigirle en cada sesión. No hay que ser rígidos, sí disciplinados en todo momento.

-Todo deportista de élite pasa por una lesión grave de la que extrae lecciones, ¿cuál fue la suya?

-Uno se da cuenta de que ha de apoyarse en otras actividades que no tengan relación con el «running».

-Al final, ¿salir a correr es una filosofía de vida?

-Del «running» aprendes cosas que sirven en el día y tratas de estar más sano.