Pediatría

La alteración de la flora intestinal, clave en las patologías infantiles

La alteración de la flora intestinal, clave en las patologías infantiles
La alteración de la flora intestinal, clave en las patologías infantileslarazon

La "disbiosis"de la microbiota (así se denomina a la alteración) también puede estar relacionada con futuras enfermedades autoinmunes o metabólicas.

El aumento de patologías como alergias, dermatitis atópica o asma en niños parece estar íntimamente relacionado con la alteración de la flora intestinal debido, entre otros factores, a una mala alimentación durante la infancia e, incluso, de la madre durante el embarazo.

Así lo ha advertido el dietista, nutricionista, investigador y docente del departamento de Pediatría, Obstetricia y Ginecología de la Universidad de Valencia, Jesús Sanchís, quien durante esta semana ha participado en un curso de verano de la Universidad de Alicante "Rafael Altamira"sobre nutrición infantil avanzada, concretamente sobre la microbiota intestinal (microorganismos de los intestinos).

En una entrevista concedida a Efe, este experto ha explicado que la microbiota intestinal empieza a programarse desde la gestación, por lo que resulta trascendental que los progenitores cuiden su alimentación incluso antes el nacimiento.

La "disbiosis"de la microbiota (así se denomina a la alteración) también puede estar relacionada con futuras enfermedades autoinmunes o metabólicas, como por ejemplo la obesidad o la resistencia a la insulina, cada vez más presentes entre la población infantil.

Entre los factores que pueden contribuir a dicha variación negativa se encuentra la toma de antibióticos o fármacos en general, como el extendido omeprazol; también el parto por cesárea o la lactancia artificial, que contribuyen a una microbiota "diferente y peor", tal y como ha indicado Sanchís.

La falta de ejercicio físico y el desarrollo de los pequeños en ciudades alejadas de la naturaleza son otros componentes que debilitan su sistema inmunológico.

"Es muy importante que los niños estén en contacto con la naturaleza, pues son numerosos los estudios que revelan que los pequeños que crecen en entornos rurales tienen índices de alergia y asma significativamente menores que aquellos que lo hacen en entornos urbanos", ha incidido.

Sin embargo, a pesar de todos estos factores, quizá el más importante termina siendo, por evidente, la alimentación.

A una edad temprana, Sanchís ha recomendado una dieta basada, principalmente, en frutas, hortalizas y tubérculos, evitando productos "altamente procesados"como los potitos o la bollería industrial.

El motivo es que suelen contener cantidades importantes de azúcares, edulcorantes artificiales, grasas perjudiciales, emulsionantes y otros aditivos que perjudican a la microbiota y, por tanto, a la salud.

Esta recomendación se extiende más allá de la infancia, puesto que es imprescindible para que los adultos también dispongan de una microbiota intestinal sana y se muestren coherentes con el mensaje que trasladan a los niños.

En cuanto a los bebés, "no hay nada mejor que la leche materna"ya que contiene probióticos (microorganismos vivos procedentes del intestino de la madre) y prebióticos (el alimento de los probióticos) que son claves para una salud intestinal idónea.

Sanchís ha explicado lo que se denomina "eje microbiota-intestino-cerebro", el cual certifica que cualquier alteración de una de estas partes afecta, invariablemente, a las otras dos.

"Uno de los grandes problemas actuales es la mala gestión del estrés y las emociones, porque terminan por alterar la microbiota de la madre y, por ende, la de los bebés", ha especificado.

¿Hasta cuándo es recomendable la lactancia materna? Para Sanchís es una decisión de dos partes: la madre y su hijo: "Siempre que se pueda, debe ser exclusiva hasta aproximadamente los seis meses y extenderla hasta que la madre y el niño quieran", ha opinado. EFE