Prevención

La piel como indicador de riesgo cardiovascular

La psoriasis no es una enfermedad exclusiva de la piel. En la consulta, los dermatólogos controlan la hipertensión, los niveles de glucosa y el colesterol de los pacientes para mantener a raya su riesgo cardiovascular

Las claves de la patología
Las claves de la patologíalarazon

La psoriasis no es una enfermedad exclusiva de la piel. En la consulta, los dermatólogos controlan la hipertensión, los niveles de glucosa y el colesterol de los pacientes para mantener a raya su riesgo cardiovascular

En palabras de Rosa Izu, del Hospital Universitario Basurto (Bilbao), aunque el diagnóstico de la psoriasis es relativamente sencillo, esta enfermedad es la manifestación de fenómenos complejos. Así la psoriasis implica un estado inflamatorio que explicaría en parte el incremento de los factores de riesgo cardiovascular. «Cuando varios de ellos se dan simultáneamente, hablamos de síndrome metabólico», explica. El estrés y las infecciones son otros de los elementos que hay que valorar a la hora de manejar correctamente la psoriasis, añadía.

Patología sistémica

Es el mismo enfoque en el que hacía hincapié Antonio Martorell, del Hospital de Manises en Valencia. También este especialista se refiere a la psoriasis como una enfermedad sistémica (de todo el cuerpo): «El equilibrio entre estado inflamatorio y no inflamatorio está alterado en los pacientes con psoriasis, y la inflamación es patológica. De hecho, una de las claves en el futuro de los tratamientos para la psoriasis (y de las enfermedades que la acompañan) es una vía molecular relacionada con la inflamación, la de la proteína conocida como IL-17». Martorell añadía que hay estudios que indican que la inflamación crónica es la que hace que los pacientes con psoriasis tengan mayores índices de problemas coronarios y enfermedades hepáticas, «aunque ahora se trata a los pacientes en fases tempranas y en muchas ocasiones estos problemas no llegan a desarrollarse».

Ambos expertos, presentes en el último congreso de la Academia Europea de Dermatología y Venereología que se ha celebrado en Copenhague (Dinamarca) se mostraban satisfechos por la considerable cantidad de nuevas terapias para la psoriasis que se han dado a conocer en el encuentro. «El 75 por ciento de las presentaciones del congreso han sido nuevos tratamientos, nuevas indicaciones... uno de los que más ha llamado la atención ha sido un fármaco que consigue el blanqueamiento completo de la piel y la reducción de las comorbilidades. Si antes el objetivo era controlar la psoriasis, ahora es vivir totalmente libre de la enfermedad», declaraba Martorell.

Raquel Rivera, del Hospital 12 de Octubre, autora de uno de los estudios sobre esta materia presentados en el encuentro científico, profundizaba en esa idea: «Había buenos tratamientos para controlar la enfermedad, pero ciertos pacientes no respondían a ellos. Hemos visto terapias biológicas cuyo objetivo era alcanzar un PASI 75 (índice de blanqueamiento de lesiones en la piel). Por bueno que sea, no es lo que el paciente necesita. El fármaco más potente hasta la fecha, que interactúa con IL-17, ha permitido elaborar estudios en los que el objetivo es PASI 90, la práctica desaparición de las lesiones en la piel, y además se ha observado que una proporción considerable de pacientes tratados con él ha llegado a PASI 100, blanqueamiento total».

Rivera hacía hincapié en la noción del abordaje sistémico. En sus palabras, los dermatólogos forman con el personal de enfermería y médicos de otras disciplinas equipos que vigilan todos los aspectos de la enfermedad para acompañar a los pacientes en el proceso de un tratamiento integral.