Una buena educación alimentaria puede disminuir un 15% el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular

Gracias a ella, Almodóvar del Río está cambiando su percepción hacia la alimentación y sus hábitos saludables

Una buena educación alimentaria ahora supone disminuir un 15% las posibilidades de padecer una enfermedad cardiovascular o, incluso, cáncer en un futuro. Bajo esta premisa es sobre la que actúa el programa pionero “Smart Healthy Citizen (SHC”) impulsado por la Fundación SHC de la compañía farmacéutica Pharmex, con el único objetivo de crear ciudades inteligentes y sostenibles con un futuro duradero. Gracias a una enseñanza acreditada, la mentalidad de un municipio entero (Almodóvar del Río, Córdoba) está cambiando su percepción hacia la alimentación y sus hábitos. El primero de los ámbitos de actuación radica en los centros de enseñanza: semanalmente, un equipo de nutricionistas imparte clases a los niños y niñas sobre alimentación. En ellas, descubren a los estudiantes aspectos tan sencillos como la importancia de beber de dos a tres litros de agua diarios, a no saltarse ninguna de las cinco comidas diaria esenciales, o a saber que se puede comer de todo, pero de una forma equilibrada y variada. Los padres y madres de los alumnos forman una parte esencial de estas enseñanzas. Gracias a talleres llevados a cabo por especialistas en nutrición, el programa les ayuda a conocer detalladamente cómo pueden mejorar sus hábitos alimenticios y lo de todas sus familias, creando una involucración mayor por ambas partes.

Otro de los pilares fundamentales se centra en los medios de comunicación ya que, según Sheila Romera, directora del programa SHC, “el 30% de las ‘fake news’ son de contenido alimenticio”, unas noticias que se propagan, en la mayoría de las ocasiones, de forma más rápida que las noticias reales. Semanalmente, niños y niñas del pueblo cordobés son los encargados de realizar y de llevar a cabo el programa radiofónico “Smart reporteros” de contenido alimenticio saludable. Los estudiantes más jóvenes del municipio aprenden la misión informadora de los medios de comunicación, así como la importancia de informarse a través de medios certeros y no así por redes sociales o Internet sobre ésta y otras cuestiones.

El problema principal de la sociedad actual son las horas que pasamos delante del teléfono móvil, tableta u ordenador, algo que se ve reflejado en los más pequeños de la casa. Muestra de ello es que los niños españoles (de entre cinco y 12 años) pasan unas dos horas y media cada día de su tiempo de ocio frente a los dispositivos móviles, mientras que sólo disfrutan de una hora al día de media jugando en la calle. El problema “no es sólo lo que se come, sino lo que no se quema” por lo que el programa SHC enseña a recuperar hábitos como practicar deporte al aire libre y concienciándoles de que lo importante en las clases de educación físicas así como en cualquier otra actividad no es ganar, sino participar de modo que con esa participación ayuden a su cuerpo a moverse, a mejorar su riego sanguíneo, sudar y, además, disfrutar de un rato agradable con sus amigos y compañeros.

Todos a una: alimentación sostenible en todo el municipio

La implicación de todos los agentes de Almodóvar del Río está resultando del 100%. Se han sumado médicos y todo el personal sanitario de la localidad ya que junto con los nutricionistas aportan las líneas maestras para mejorar y adaptar las rutinas alimenticias de los restaurantes del municipio: su hostelería ha modificado sus cartas adaptándolas para conseguir platos equilibrados, ricos, ecológicos y sostenibles contribuyendo también a agricultores y ganaderos locales. Igualmente las farmacias están actuando de educadores de dietas y hábitos saludables.

A la vista de todo lo mencionado y de la aceptación de la población de Almodóvar del Río, se puede subrayar que la prevención es una palabra clave, que está íntimamente ligada al concepto de sostenibilidad del sistema sanitario. Dentro de unos años necesitamos una población cada vez más sana y saludable para que cuando envejezcan el uso de los servicios sociales y sanitarios sea menor y permita que aquellos que puedan utilizarlo lo puedan hacer.